En 2014, el diseño de BIG para el nuevo museo fue seleccionado por Audemars Piguet a raíz de un concurso de arquitectura para ampliar las instalaciones históricas de la marca e "ilustrar el alma de la Manufactura", según Jasmine Audemars, Presidenta de la Junta Directiva. El resultado fue un pabellón en forma de espiral, que recuerda el espiral del movimiento de un reloj, totalmente respaldado por paredes de cristal curvadas. La espiral contemporánea flanquea el taller original donde la historia de Audemars Piguet comenzó en 1875 y donde se alojó una versión anterior del museo de 1992 a 2019. La arquitectura vernácula del edificio histórico se ha recuperado por completo a partir de un estudio exhaustivo de los materiales de archivo. El concepto del Museo Atelier fusiona así la tradición y el espíritu progresista que existe en el corazón de Audemars Piguet.

Como explica Bjarke Ingels, Fundador y Director Creativo de BIG, “a diferencia de la mayoría de las máquinas y la mayoría de los edificios actuales que tienen una desconexión entre el cuerpo y la mente, el hardware y el software, para el Museo Atelier Audemars Piguet hemos intentado integrar completamente la geometría y el ejecución, la función y la forma, el espacio y la estructura, el interior y el exterior en un todo simbiótico ".

El elaborado proyecto arquitectónico fue ejecutado por equipos de expertos y artesanos, incluido CCHE, el estudio de arquitectos local que construyó la estructura, la primera en su género a tal altitud. La escenografía ideada por el internacionalmente conocido ATELIER BRÜCKNER fue construida como una partitura musical, creando una experiencia dinámica para los visitantes. Los interludios, que incluyen autómatas, instalaciones cinéticas y maquetas de intrincados movimientos mecánicos, dan vida y ritmo a varios aspectos de la técnica y el diseño de la relojería. Mientras los espectadores rodean el edificio, la valiosa colección de relojes ilumina la historia de Audemars Piguet y de la relojería en el valle. La visita culmina en el centro de la espiral con la exhibición de algunos de los relojes más complicados de la Manufactura. La espiral también incluye dos talleres, donde se realizan creaciones de Alta Joyería y Grandes Complicaciones. Los visitantes pueden observar a los relojeros que trabajan dentro de las paredes de cristal curvadas del museo y experimentar su pericia de primera mano.

Sébastian Vivas, Director de Patrimonio y Museo de Audemars Piguet, explica: “El Museo Atelier rinde homenaje a las familias Audemars y Piguet que formaron parte de una larga tradición relojera. El nuevo espacio, junto con el taller tradicional, es el lugar de encuentro perfecto donde los visitantes pueden interactuar con nosotros y nuestros relojeros, mientras aprenden sobre la marca y la historia de la relojería en la región ".

El pabellón espiral también habla del compromiso compartido de BIG, CCHE y Audemars Piguet con la sostenibilidad ambiental. La estructura contemporánea cumple con los últimos requisitos de Swiss Minergie® en términos de eficiencia energética y construcción de alta calidad. El Museo Atelier también alberga la Fundación Audemars Piguet, que ha contribuido a la conservación de los bosques a través de la protección del medio ambiente y los programas de sensibilización de los jóvenes desde 1992.

Para fomentar el compromiso cultural y artístico de la compañía, el Museo Atelier es también un lugar de exhibición adecuado para una selección de obras de arte creadas por artistas contemporáneos, comisionadas por Audemars Piguet. Para la inauguración del museo, Audemars Piguet exhibe obras de arte comisionadas por antiguos amigos de las marcas Dan Holdsworth, Quayola y Alexandre Joly, que reflejan el intercambio creativo que la Manufactura ha fomentado entre la Alta Relojería y el arte contemporáneo desde 2012.