Las Islas Baleares son un paraíso terrenal donde la naturaleza, la cultura, el ocio y el deporte se unen para exprimir al máximo la experiencia más mediterránea. No solo las maravillosas playas le cautivarán, también su interior. Aquí una selección que no dejará indiferente a nadie. El arte gótico de la Catedral de Mallorca Construida […]
Dirigentes Digital
| 30 jul 2021
Las Islas Baleares son un paraíso terrenal donde la naturaleza, la cultura, el ocio y el deporte se unen para exprimir al máximo la experiencia más mediterránea. No solo las maravillosas playas le cautivarán, también su interior. Aquí una selección que no dejará indiferente a nadie.
Construida entre los siglos XIV y XVI, la Catedral de Mallorca es uno de los mayores exponentes de la arquitectura gótica mallorquina. En su interior sintetiza sus ocho siglos de historia alojando grandes obras de arte de diferentes períodos (Gótico, Renacimiento, Barroco y Contemporáneo). Su rosetón central, compuesto por 1.115 cristales es uno de los más grandes del estilo gótico. Además del interior de este emblemático edificio, también se puede visitar el campanario y contemplar Palma desde otra perspectiva diferente y única, destacando emplazamientos como el Castillo de Bellver o el Palacio de la Almudaina.
Si es un apasionado de la historia, las islas tienen una gran variedad de yacimientos arqueológicos muy bien conservados de distintas épocas, desde la edad de bronce hasta el siglo II d.C. Se sentirá como Indiana Jones al visitar en la isla de Mallorca la necrópolis de Punta dels Fenicis (Finca pública de Son Real), utilizada desde la edad de hierro hasta la época romana o el yacimiento arqueológico de Poblado fenicio de sa Caleta en el municipio de Sant Josep en Ibiza, declarado en 1999 como Patrimonio de la Humanidad.
Visite las playas y calas de las islas y relájese al sol mientras disfruta de la brisa del mar. También puede hacer windsurf, vela, kayak, paddle surf o buceo en las aguas turquesas mediterráneas en lugares tan maravillosos como en el Arenal Des Castell (Es Mercadal, Menorca) o la cala Banyalbufar (Banyalbufar, Mallorca). O si le gusta navegar, también cabe la posibilidad de dar un paseo relajante en catamarán o en barco para recorrer el litoral y sumergirse en el mar cuando quiera.
Si por el contrario es más de secano y prefiere los paisajes rurales también puede hacer rutas de senderismo como el Camino de Sa Pujada, uno de los más bellos y antiguos de Formentera. Podrá visitar los distintos faros de la ruta y desde los acantilados de la Mola divisar Ibiza y el resto de la isla. También destacan los parques naturales como Parque natural Albufera des Grau en Menorca o el paraje natural Els Amunts (Ibiza). Además de la flora y fauna, se puede avistar en la reserva natural de la Albufera pájaros como el cormorán, la garza o el águila pescadora y en Els Amunts aves como el halcón de Eleonor y peregrino, cormoranes moñudos, pardelas y gaviotas. Otra opción es hacer rutas en bici o a caballo, toda una experiencia que hará del paseo una actividad amena y divertida.
Si es de los que se enamoran del cielo estrellado, no hay mejor plan que desconectar y observar las estrellas del cielo nocturno. Menorca es uno de los mejores lugares para hacerlo, acreditado por la Fundación Starlight, que desde enero de 2019 es Reserva y Destino Turístico Starlight. Cuando anochece, se puede apreciar cómo se ilumina en cielo de la isla con infinidad de estrellas creando un espectáculo único. Gracias al compromiso por reducir la contaminación lumínica, se puede realizar esta actividad desde diversos puntos de la isla.