Comenzar de cero es difícil. Surgen mil y una preguntas y no sabes dónde encontrar respuestas. Esto le ocurrió a Berta Martín cuando fundó una tienda de ropa llamada Poète en 2009. Diez años después, Poète es una marca que cuenta con 19 puntos de venta entre tiendas propias y corners en los centros de El Corte Inglés. Además, dispone de venta online y más de 100 puntos de venta multimarca. DIRIGENTES habla con ella para conocer la fórmula de su éxito.



¿Cómo surgió la idea de embarcarte en el mundo de la moda, en el que hay tanta competencia?

Mi familia, de toda la vida, ha tenido tiendas. Mi abuela, mi madre... Cuando mi madre cerró su última tienda me dio mucha pena, no quería dejar la tradición, y decidí abrir una tienda. Pero sin ningún ánimo de montar una marca ni de crear una cadena de tiendas. Monté simplemente una tienda de ropa. Fue surgiendo todo un poco. 

Finalmente habéis conseguido una expansión increíble. ¿Cómo conseguiste diferenciarte y encontrar un hueco en el mercado?

Lo que tuve claro: la diferenciación. Sabía perfectamente el tipo de ropa que quería vender, el concepto de marca, el nombre... Buscaba que todo hablara en el mismo lenguaje y fuera un poco lo mismo siendo a la vez diferente a lo que había en ese momento en el mercado. Y funcionó. 

Fusionáis la moda con el concepto de París y los años 20. ¿A qué se debe esta inspiración?

Realmente se refleja en la imagen de las tiendas. Pero en las colecciones lo que hacemos es la diferenciación de producto: son prendas muy románticas y femeninas. Lo que nos dicen nuestras clientas es que siempre que se ponen algo de Poète, la gente les pregunta de dónde es. Al final es porque tienen ese toque que las hace diferentes a lo que hay en el mercado.

Tienda Poète ubicada en Fuencarral (Madrid)

¿Ofrecéis ropa a todo tipo de mujeres u os enfocáis en un target determinado?

Tenemos un estilo muy concreto. No buscamos a una clienta determinada. Son muy diferentes. Desde una niña de 15 años a una señora de 65. Pero no es que nuestro target sea muy amplio. Es que es un estilo. Vendemos un estilo. Y si te gusta, da igual la edad que tengas.

Para acabar, después de todo este tiempo, ¿qué dirías que es lo más difícil que te ha resultado?

Enfrentarte a cosas que no sabes. A mí nadie me ha enseñado a crear una empresa, contratar gente, cómo hago esto o lo otro... Al final tienes que buscarte la vida hasta que lo consigues. Y muchas veces pecas de inocente porque no sabes cómo deberías hacer una cosa determinada. Al fin y al cabo nadie te lo ha explicado. Nada más acabar la carrera empecé con Poète. De muchísimas cosas no sabía, ya que al montar una empresa, aunque sea de moda, tienes que saber de miles de cosas que no sólo son moda. Sale muy caro aprender (ríe).