La típica “limonada” de Sahagún, un pueblo situado en la provincia de León, justo en el centro del Camino de Santiago, recuerda a los alemanes el sabor de la sangría del hotel en Mallorca. Los bares llenos para la ocasión de Semana Santa, al igual que sus procesiones, aparentemente más genuinas y femeninas que otras, rememoran el famoso Carnaval de Colonia, donde también todo el mundo fraterniza con un disfraz puesto y una bebida alcohólica en mano.

Desde que el cómico, escritor y actor alemán Hape Kerkeling escribiera un bestseller sobre su experiencia en este viaje espiritual en España, millones de alemanes han seguido sus pasos para iluminarse marchando por el campo español hasta Santiago de Compostela. De esta manera, muchos turistas alemanes han conocido totalmente otra cara de España, lejos de la playa y el sol.

Para la economía nacional es un turismo más interesante porque es más sostenible y, al mismo tiempo, ayuda a pueblos como Sahagún a mantener sus tiendas de especialidades en región y una infraestructura mínima comercial de marzo a octubre. Aunque no hablan el idioma y no todos son creyentes, los alemanes, británicos y americanos se sienten en esta Semana Santa 2022 parte de este “buen rollo” de mujeres, hombres y niños de Sahagún que han trabajado todo el año para dar brillo a estos pasos, acompañados de la banda del pueblo.

Se olvida por un momento que el pueblo forma parta de la España vaciada y llaman la atención los numerosos carteles colgados donde dice “se vende” y “se alquila”. Los peregrinos beben alegremente con los españoles y se mezclan en los muchos albergues que hay en Sahagún. Algunos establecimientos necesitan urgentemente inversión, por ello, este inicio de la temporada es tan importante para la provincia de León. Aquí, donde está la tumba de Alfonso VI, llamado El Bravo, también por haber tenido seis esposas, se da la bienvenida a cualquier visitante, especialmente después de los dos duros años de pandemia.

No solamente pasa en Sahagún. Un estudio de la página turística Jetcost revela que, España es el destino favorito en estas vacaciones de Pascua para los extranjeros.

La ternura española se refleja en las fiestas y es apreciada por el turista

Una razón para el éxito del Camino de Santiago en 2022 es también que después de once años se ha abierto otra vez la Puerta Santa de la catedral de Santiago de Compostela por ser el año Jubilar.

Pascua ya es temporada alta para muchas ciudades y pueblos, no solamente Sahagún. En Sevilla, donde más tradiciones tienen los cultos religiosos y fiestas de este tipo, los ingresos de la Semana Santa en el año 2019 fueron de alrededor de 400 millones de euros, según las estimaciones del ayuntamiento. Mientras en Andalucía se celebran romerías durante todo el año, en el norte de España se aprovecha internacionalmente cada vez más del Camino de Santiago: “Por el momento el 50% de nuestros visitantes vienen de Corea”, cuenta el cofrade Miguel Fernández de Sahagún: “Este año todavía no han vuelto por las restricciones de viaje que todavía existen en Asia, pero normalmente están en estas fechas aquí y llenan nuestros bares”.

Spain is different

Mientras la Pascua en Alemania se celebra el domingo con una muy buena comida en familia, con los huevos de chocolate escondidos en el jardín para los niños, “en España sin embargo es la parte menos popular”, reconoce José Antonio Méndez que mantiene con su familia lo que fue el monasterio de San Benito donde el fraile Bernardino de Sahagún estudió durante un tiempo. Este misionero es el más destacado que se recuerda en la historia de México por su labor en favor de los indígenas. “Alrededor de los personajes se inventan leyendas porque parece que el ser humano y el turista lo aprecian”, reconoce Méndez.

España es una nación maestra en el aprovechamiento de la religión por fines turísticos. Según datos oficiales hay 23.000 iglesias y 750 monasterios que son en muchas ocasiones una obra de arte en sí, y conllevan dentro joyas del arte sacro que atraen también a muchas turistas. Para la región de Sahagún este año tiene un valor turístico especialmente importante gracias a la exposición “Las edades del hombre” que ha atraído la atención de muchos peregrinos y amantes del arte sacro. Un patrimonio que se quiere promocionar ahora a nivel gubernamental.