El crudo cayó a su nivel más bajo de las últimas dos semanas debido a que los inversores sopesaban un posible aumento en la producción de Arabia Saudita y Rusia ante la preocupación de que las sanciones iraníes provoquen una nueva crisis global de suministro. China e India, dos de los principales consumidores limitaron las compras de petróleo procedentes de país iraní, mientras que Corea del Sur las ha detenido por completo ante las inminentes sanciones de EE.UU.
Irán es el quinto mayor productor de petróleo y el tercero de la OPEP, por lo que una fuerte disminución de producción podría volver a desequilibrar el mercado de oferta. Sin embargo, parece que Rusia y Arabia Saudí están preparados para cubrir esos potenciales recortes para mantener estable la producción de crudo.
Desde la pasada reunión de los miembros de la OPEP, donde se anunció un aumento en la producción, el petróleo se ha movido en un rango entre los 70 y los 75 dólares por barril, lejos de los máximos anuales en torno a los 80$. Aunque se ha especulado durante estos dos últimos meses con que varios miembros de OPEP podrían estar bombeando más petróleo del acordado, los inversores vuelven a tener la sensación de que el mercado se ha vuelto a equilibrar.
Muchos analistas consideran que las sanciones a Irán podrían devolver los precios a los 100 dólares por barril, sin embargo, lo vemos muy complicado, ya que consideramos que Arabia Saudí y Rusia estarían dispuestas a compensar dicha reducción, pues a este nivel de precios les ayudaría a apuntalar sus economías. Además, los productores norteamericanos todavía no han incrementado su producción al límite de sus posibilidades.
La próxima reunión de la OPEP es el 3 de diciembre y las sanciones a Irán empiezan oficialmente el 4 de noviembre, por lo que la OPEP tendrá un mes para evaluar la evolución de los precios del petróleo y decidir si vuelve a aumentar la producción o la mantiene constante.
También existen otras dos variables que podrían frenar la subida de los precios hacia niveles de 2014, la primera es la guerra comercial que mantienen EEUU y China, ya que en el caso de incrementarse podría amenazar el crecimiento global y reducir la demanda de petróleo. La segunda es la preocupación que ha manifestado Donald Trump por la subida en los precios de la gasolina, y es que en el caso de que continúe dicha subida podríamos ver cómo trata de influir en el merado del petróleo nuevamente.
El West Texas Intermediate con vencimiento a octubre cotiza a 70.14 dólares el barril en la Bolsa Mercantil de Nueva York El volumen total negociado fue aproximadamente un 36% superior al promedio de 100 días.
Mientras que el Brent con vencimiento en noviembre cotiza a 79.39 dólares en la bolsa ICE Futures Europe después de un avance del 2.2% el martes. El índice de referencia global se negoció con una prima de 9.75 dólares frente al WTI, la más alta desde finales del mes de junio.
Joaquín Robles, analista de XTB