Desde que lanzamos Peoople hace dos años, no ha habido un solo día en que no hayamos verificado la validez del planteamiento de partida: cuando necesitamos algo, el consejo o la opinión de una persona cercana es imbatible frente a cualquier publicidad, anuncio, oferta comercial, video promocional, etc.

Queríamos crear una app que ayudase a las personas a encontrar y descubrir cualquier cosa que pudiesen necesitar gracias a la recomendación de su gente de confianza: sus amigos, sus familiares y sus influencers favoritos. Y queríamos que esa búsqueda, ese descubrimiento, pudiese enfocarse a cualquier cosa que esa persona pueda necesitar: un restaurante, un libro, un vino, una tienda, un hotel o un profesional. Solemos decir que la confianza no es vertical, sino transversal: cuando nos fiamos del criterio de alguien, es habitual que extendamos esa validación a cualquier consejo que nos puedan dar.

Así somos las personas. Así funciona la magia de la confianza. Porque si algo tenemos claro es que esto ya existía antes: es la base del boca a boca de toda la vida. Por eso era tan importante llevarlo a una app móvil, ahora que los smartphones ocupan una parte tan importante de nuestras vidas. Y por eso está funcionando tan bien: seguramente porque en este nuevo entorno, queremos seguir funcionando como lo venimos haciendo de toda la vida.

Dentro de poco, gracias a esta tecnología, podremos tomar cualquier tipo de decisión mejor informados y, sobre todo, con mayor seguridad, porque sabremos que no es un algoritmo o un desconocido quien nos sugiere ese hotel, ese restaurante o ese libro. Es Lola, de mi panda del gimnasio, o Paco, mi compi desde que empecé en este trabajo, o mi prima Carmen, o María Pombo, mi influencer favorita en temas de tiendas de ropa.

Es un poco de magia, como todo lo que tiene que ver con la tecnología. Pero, como decíamos antes, queremos pensar que está gustando tanto porque de un modo u otro, todos lo estábamos esperando.

¿Te unes?

David Pena del Río, CEO de Peoople