Los vehículos eléctricos e híbridos dominan la publicidad, en Internet y la televisión. Por todas partes se anuncian las bondades de los coches que se propulsan con combustibles alternativos a la gasolina y el gasoil, por lo que el consumidor podría llevarse a engaño al pensar sobre la representación real de este tipo de vehículos […]
MotorDirigentes Digital
| 24 feb 2021
Los vehículos eléctricos e híbridos dominan la publicidad, en Internet y la televisión. Por todas partes se anuncian las bondades de los coches que se propulsan con combustibles alternativos a la gasolina y el gasoil, por lo que el consumidor podría llevarse a engaño al pensar sobre la representación real de este tipo de vehículos sobre el resto.
Lo cierto es que el año pasado se incrementaron un 24% las ventas de este tipo de vehículos, hasta superar las 200.000 unidades. Esa evolución ha llevado la cuota de mercado de estos coches hasta rozar el 20% del total, es decir, casi uno de cada cinco vehículos matriculados en 2020 eran eléctricos, híbridos o se propulsan con gas.
Según Anfac, la patronal de los fabricantes de automóviles, los híbridos enchufables han protagonizado el mayor aumento de 2020, al triplicar sus ventas y elevarlas hasta 23.360 unidades. No obstante, los híbridos no enchufables mejoraron sus cifras hasta alcanzar las 140.869 unidades matriculadas. Por el contrario, los vehículos de gas prácticamente redujeron a la mitad sus matriculaciones, con 17.220 el año pasado.
Estos datos, tanto los de crecimiento como los descensos, reflejan que el mercado está lejos de consolidarse, de modo que algunas tecnologías acabarán predominando y otras pueden acabar siendo marginales. Al menos, ese es el análisis que hace Marcos Moure, director general de la cadena de estaciones de servicio AutoNet&Oil.
“Vamos a una época a medio plazo en que habrá un poco de todo, incluso ecodiésel, que prácticamente tiene una contaminación cero”, vaticina este dirigente del sector. En efecto, la cuota de estos vehículos sobre el total se incrementa, pero el diésel y la gasolina mantienen su predominio en el mercado español.
Es por ello que los fabricantes perciben que el cambio hacia la electromovilidad avanza “muy lenta” en comparación con otros países europeos. El Barómetro de electromovilidad de Anfac compara la penetración del vehículo eléctrico así como de las infraestructuras de recarga de acceso público. España obtiene una puntuación de 18,6 sobre 100, mientras que la media europea asciende a los 39,9 puntos.
Moure cree que “entramos en ese momento donde cada grupo interesado intenta cambiar a su modelo pero ni todo es fantástico ni todo es malo”. Las cifras actuales reafirman su análisis. “Se tendrá que ir equilibrando”, observa con respecto a las distintas tecnologías que han entrado en juego.
Con todo, apuesta por que “en los próximos años el peso del carburante seguirá siendo elevado”. Esta evolución también tiene que ver, desde el punto de vista de Anfac, con que la administración no esté invirtiendo lo suficiente por la electrificación: “El muy lento desarrollo de infraestructuras de recarga coloca a España 10 puntos por debajo de la media europea”.