En los últimos años, en el marco de la industria 4.0, los avances en la tecnología de automatización han incrementado la presencia de la robótica dentro de las industrias. En concreto, los robots colaborativos, más conocidos como cobots, llegan para revolucionar el espacio de trabajo y convertirse en compañeros de los propios operarios llevando así […]
Dirigentes Digital
| 19 feb 2020
En los últimos años, en el marco de la industria 4.0, los avances en la tecnología de automatización han incrementado la presencia de la robótica dentro de las industrias. En concreto, los robots colaborativos, más conocidos como cobots, llegan para revolucionar el espacio de trabajo y convertirse en compañeros de los propios operarios llevando así la productividad y la eficiencia a la máxima potencia. Su presencia en las fábricas consigue eliminar tareas repetitivas que restan mucho tiempo a los trabajadores.
El mercado de los robots colaborativos es relativamente nuevo, pero su potente irrupción en las industrias es un hecho. Pese a que todavía siguen siendo un nicho, se vuelven cada vez más comunes dentro de las empresas debido a su programación sofisticada e intuitiva que permite su fácil implementación. Las cifras hablan por sí solas: la Federación Internacional de Robótica, señaló que las instalaciones anuales de cobots se incrementaron un 23% de 2017 a 2018, lo que refleja una gran demanda de herramientas de fin de brazo.
Un país que lidera el desarrollo de la robótica a nivel mundial es Dinamarca y más concretamente, Odense, su tercera ciudad más grande. En este lugar es donde se concentra uno de los mayores clúster de empresas robóticas llamado Odense Robotics. Tanto es así que aquí se encuentran más de 130 empresas dedicadas a esta actividad. Este ecosistema empresarial se ha convertido en un punto de acceso europeo para la robótica y la automatización, así como un imán para los inversores.
Una de las empresas ubicadas en este epicentro de la robótica mundial es OnRobot. Esta compañía danesa es responsable del concepto “one stop shop” de aplicaciones colaborativas y nació con la aspiración de convertirse en líderes del sector de herramientas colaborativas con el sistema plug & produce (enchufar y producir) para aprovechar las ventajas de los cobots. De hecho, ellos integran pinzas, sensores y otros equipos de cobots para facilitar el uso de la tecnología en diferentes tareas como pueden ser el embalaje, la manipulación de materiales, montaje o soldadura, entre otros. Para conocer más acerca del panorama actual de la industria de la robótica colaborativa, DIRIGENTES ha hablado con el CEO de OnRobot, Enrico Krog Iversen.
¿Cuáles son los beneficios de tener cobots en una industria?
La gran ventaja de tener robots colaborativos es que pueden implementarse muy rápidamente, mucho más rápido que los robots tradicionales y también a un coste mucho menor. Por lo tanto, hay un beneficio financiero al trabajar con cobots en las fábricas. Es por ello que sus características hayan hecho que las inversiones en automatizaciones sean más atractivas también para las pymes.
Para la gente que trabaja en la fábrica, también existe la ventaja de que pueden ver al robot como un compañero más y no tienes que aislarlo o poner una valla a su alrededor, por lo que puedes tener más robots en el mismo lugar, ya que ocupan el mismo espacio que un humano. Mientras que si quieres poner más robots tradicionales, necesitarías más espacio porque también será necesario poner la protección correspondiente alrededor del robot.
¿Cuáles son los principales mercados de la industria robótica en el mundo? ¿Qué posición ocupa España en la robótica colaborativa?
Europa y Norteamérica son los impulsores de la automatización, pero también gran parte de los países de Asia- Pacífico. En cuanto a esta última región, China es grande, Singapur también lo es y, por su parte, muchos fabricantes se están trasladando a Vietnam y Filipinas.
Si miramos hacia Europa, Alemania sigue siendo el mayor mercado de robots. España está creciendo bastante rápido y parece haber también una mayor aceptación de los robots y de la automatización en España en general.
Conozco a una de las personas que dirige uno de los sindicatos más grandes de Dinamarca y es muy partidario de los robots y realmente quiere más robots en las fábricas porque es consciente de que es la única forma en la que puede apoyar a los trabajadores. Y la última vez que le vi estaba en España para hablar con los sindicatos españoles sobre cómo los robots pueden ayudar a salvar puestos de trabajo.
¿Por qué eligió Odense como sede de OnRobot?
Odense fue elegido como sede para el antiguo OnRobot antes de que yo me involucrara como inversor. Decidimos mantener la sede central en Dinamarca porque uno de nuestros grandes inversores es el Danish Growth Fund, que es un fondo de crecimiento respaldado por el gobierno y que solo puede invertir en empresas danesas. Así que al tener la sede aquí, ellos pueden invertir y nosotros podemos reinvertir fuera de Dinamarca.
¿Por qué Odense es conocido como el ‘Silicon Valley’ de Dinamarca?
Odense ha estado activa en la robótica durante muchos años. De la mano de un viejo astillero (barcos de construcción, grandes contenedores), ya en los años 70 empezaron a buscar diferentes tipos de robótica, principalmente la soldadura. El propietario del astillero hizo una gran donación a la Universidad local.
Así que han estado investigando mucho sobre la robótica en Odense durante muchos años, y luego con Universal Robots, esa fue la primera vez que se puede decir que la industria fue realmente exitosa desde el punto de vista comercial. Y eso ha atraído a mucha gente que quiere dedicarse a la robótica y también ha atraído a muchos inversores. Así que creo que por eso viste que la “marca Odense” era Robotic Valley.
Los robots colaborativos representan actualmente el 3% de las ventas mundiales de robots. Según la Federación Internacional de Robótica, se espera que la cuota aumente al 34% de un mercado de 25.000 millones de dólares en 2025. ¿Por qué este crecimiento?
Es muy simple porque es como cuando empiezas algo nuevo, entonces tienes los primeros adaptadores (del inglés, early adopters) y luego la gente lo ve, realmente ven que los cobots están funcionando. Nos ven que ponemos una herramienta adicional en los robots, que también permitirá y se utilizará en aplicaciones más diferentes, y esas dos cosas juntas pueden impulsar un crecimiento muy fuerte.
¿Los robots van a reemplazar a los humanos en el puesto de trabajo?
Sí, los robots reemplazarán a un determinado número de personas. En definitiva, los robots se harán cargo de algunas de las tareas que actualmente realizan los seres humanos. De manera similar a como ocurrió en otras revoluciones industriales que hemos tenido hace muchos años, las personas siguieron adelante y fueron cambiando su forma de hacer los trabajos. Pasamos todo nuestro tiempo en el campo y después automatizamos la agricultura y la gente se trasladó a las fábricas.
Ahora automatizamos las fábricas y la gente se trasladó a diferentes tareas. Así que, sí supondrá algún reemplazo, pero básicamente consistirá en quitar todas las tareas peligrosas y difíciles para los humanos.
El mercado de la robótica se encuentra en una fase inicial. ¿Cuáles serán las tendencias futuras en robótica colaborativa?
La tendencia que vemos hoy en día es que usted verá a los robots como un compañero, como una herramienta, que usted comienza a desplegar de más y más maneras. Así que no creo que la tendencia como tal cambie, la dirección cambiará, pero se hará más fuerte.
¿Cómo se imagina la industria robótica en un futuro? ¿Cuál será el papel que tendrán los cobots en la industria robótica?
El futuro de la industria robótica es brillante. Creo que dentro de relativamente pocos años ya no hablaremos de cobots y robots tradicionales, sólo hablaremos de aplicaciones robóticas porque la tecnología y el desarrollo de las diferentes marcas de robots las fusionarán de tal forma que todas puedan utilizarse para el mismo tipo de aplicaciones. Así que para la robótica, para la colaboración como concepto, será muy brillante, pero creo que vamos a quitar la línea entre los cobots y los robots industriales de nuevo.