Cuatro de cada diez empresas españolas ya han sufrido un ataque cibernético. Las amenazas indetectables por los sistemas de defensa tradicionales surgidos a raíz de la pandemia y de la generalización del teletrabajo han crecido un 73%, el ransomware se disparó hasta un 62% el pasado año y el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) gestionó más de 130.000 incidentes de este tipo en 2020. Ante estos datos facilitados por Ironhack, la escuela de formación tecnológica alerta de que esta situación de vulnerabilidad puede empeorar aún más con la llegada del verano, una época en la que este tipo de amenazas pueden incrementarse hasta un 40%, según detallan en una nota.

Este panorama se convierte en un escenario perfecto para los ciberdelincuentes, que aprovechan que en estas fechas parte de los equipos suelen estar de vacaciones o, un conjunto de ellos, continúan realizando sus tareas en remoto. Por ello, ahora más que nunca las empresas deben de prestar todavía más atención a sus equipos e implementar políticas de seguridad avanzadas. En esta línea, desde Ironhack comentan que los trabajadores deben de atender a dos elementos fundamentales: el email y los dispositivos móviles, a los que añaden la apuesta por la formación a lo largo de todo el año, con la idea de que los trabajadores sean conscientes de los riesgos a los que se enfrentan.

Según datos facilitados por Anovo, nueve de cada diez ataques que llegan a las compañías lo hacen a través del correo electrónico. Por ello, cuando un trabajador se va de vacaciones y deja mensajes automáticos con frases como “estoy fuera de la oficina…. Si necesita algo urgente contacte con…”, debe de tener en cuenta que el destinatario no tiene por qué conocer a los contactos habituales de sus compañeros y podría abrir algún mensaje que comprometa la seguridad de la entidad. 

Asimismo, durante estas semanas, por diferentes motivos algunos empleados no desconectan totalmente y siguen vinculados a su trabajo consultando el email o asistiendo a alguna reunión puntual de forma telemática. Al encontrarse fuera de sus domicilios habituales, en muchas ocasiones utilizan el móvil de empresa o, incluso, el personal, para llevar a cabo estas tareas, lo que también “puede suponer un riesgo para la empresa” al tratarse de un dispositivo altamente vulnerable, explican. Por ello, tanto cuando se hace uso de información laboral como personal, recomiendan no utilizar nunca conexiones wifi gratuitas, ya que son “bastante fáciles de hackear” y sugieren contar con una conexión de red privada virtual.

La nube, otra cuestión prioritaria

En esta misma línea, el informe Global Incident Response Threat Report, elaborado por VMware, en el que se analiza la forma en la que los delincuentes cibernéticos reconfiguran el panorama actual de las amenazas y muestra el importante aumento de incidentes destructivos, también indica que el uso intensivo de la nube implica que su seguridad también debe de ser una prioridad. 

Esta afirmación encuentra su sentido en que el uso cada vez más extendido de la tecnología cloud también ha supuesto que los ciberatacantes hayan seguido operando en estos entornos, haciendo visible que el 43% de las personas encuestadas para realizar este análisis afirmaron que más de un tercio de los ataques están dirigidos al trabajo en la nube y el 22% señaló que las cargas de trabajo en esta plataforma son el objetivo de más de la mitad de los ataques. 

Digitalización, un imperativo para el progreso

“Los datos son un pilar trascendental en el presente y futuro”