Desde la irrupción de la COVID-19, la digitalización de las microempresas se ha convertido en un reto y su adaptación a los nuevos entornos una necesidad. El grado de inmersión tecnológica con la que contaban unas y otras antes de la llegada de la pandemia era diferente, aunque de forma generalizada se observa que, en […]
Dirigentes Digital
| 16 sep 2021
Desde la irrupción de la COVID-19, la digitalización de las microempresas se ha convertido en un reto y su adaptación a los nuevos entornos una necesidad. El grado de inmersión tecnológica con la que contaban unas y otras antes de la llegada de la pandemia era diferente, aunque de forma generalizada se observa que, en este tiempo, las pequeñas compañías españolas han adoptado un nuevo enfoque y ahora se muestran más abiertas a la innovación y a la mejora. De igual forma, la importancia que los negocios le dan al marketing también ha aumentado, así como la atención que se presta actualmente a la ciberseguridad.
Su relevancia dentro del tejido económico nacional ocupa el 94,5% de las compañías del sector privado, por lo que para que optimicen su trabajo, maximicen su facturación y cumplan con las expectativas de sus clientes es “crucial” que “vayan incrementando el nivel de adopción de tecnología dentro de sus operaciones”. Estas son algunas de las conclusiones de un informe realizado por GoDaddy junto a Kantar, en el que se han abarcado tres corrientes de contenido referidas a los negocios, el marketing y la tecnología.
Una de las novedades de la tercera edición de este estudio es que, para su realización, en esta ocasión han participado empresarios de cuatro mercados europeos: Alemania, España, Francia e Italia. Y, sobre estos, se ha clasificado a sus proyectos a través de un baremo de digitalización compuesto por cuatro niveles en los que el “0” corresponde a muy bajo y el “100” muy alto. Así, la nota media obtenida por las empresas analizadas es de 42. Las españolas son las que obtienen la mayor puntuación (45) y a estas le siguen las italianas (44), alemanas (42) y francesas (37).
A pesar de los buenos resultados de las compañías nacionales, el informe también destaca la gran polarización existente. España es líder en el número de empresas pioneras, aquellas que se están iniciando en este mundo, caracterizadas por un comportamiento de uso intensivo y una actitud ambiciosa que refuerza la apuesta tecnológica; pero también es el país que menos negocios tiene digitalizados, aquellos que ya se encuentran asentados y están bien equipados con dispositivos, herramientas y sistemas técnicos, detallan los resultados del Observatorio sobre digitalización de GoDaddy 2021.
Siguiendo este enfoque, el análisis también resalta que, para conocer cómo ha afectado a cada negocio la emergencia sanitaria, hay que observar los retos asumidos durante el último año y medio. Para las empresas, la prioridad ha sido que el proyecto se mantuviese activo, seguido de la captación de clientes y su fidelización. Por su parte, la innovación ha quedado relegada a un segundo plano. Asimismo, durante este tiempo, los canales de venta online se han vuelto más importantes que nunca, convirtiéndose en la fórmula para dar salida a sus productos.
En España, este optimismo se refleja en muchos de los indicadores de la encuesta. El 39% de los pequeños negocios de venta por Internet han empezado a ofrecer sus servicios durante los últimos dos años. A su lado se sitúa el 53%, que afirma que han mejorado su nivel de digitalización a lo largo de estos meses impulsado, probablemente, por la pandemia, mientras que un 42% de los autónomos considera que si hubieran contado con un mayor grado de digitalización hubieran superado las dificultades derivadas de la crisis sanitaria con mayor facilidad.
Respecto a las perspectivas de futuro de estas compañías, el 78% cree que las empresas más digitalizadas se recuperarán mejor de la crisis y crecerán más en el entorno posterior a la COVID-19.
La pandemia mejora la percepción de la tecnología entre los usuarios