Topics nació hace prácticamente un año de la mano de Google, que anunciaba esta iniciativa dentro del Sandbox de privacidad de la compañía con el objetivo de mejorar la privacidad web de los usuarios. Sin dejar de lado las necesarias herramientas para que las páginas webs puedan optimizar su uso, es la alternativa a las cookies de terceros que la multinacional estadounidense proponía para paliar sus efectos sobre la privacidad de los usuarios. 

El problema es que el World Wide Web Consortium (W3C) ha rechazado esta propuesta porque no considera que preserve de forma adecuada los datos de los consumidores. El Grupo de Arquitectura Técnica (TAG), una división de W3C, pedía la pasada semana que Topics no siguiera adelante porque, según exponía uno sus miembros, esta alternativa no ofrece el control suficiente sobre los temas que el navegador comparte.

Adiós a servidores externos

Topics selecciona una serie de temas basados en los intereses del internauta en función de su historial de navegación y los conserva tres semanas, de forma que los temas antiguos van desapareciendo. En este caso, estos intereses se guardan en el dispositivo sin que servidores externos se vean involucrados y Topics ofrece al sitio web tres temas (uno por cada semana de archivo). A través de esta forma de distribución de los intereses de los usuarios webs, Google pretende alcanzar una manera “más reconocible” de controlar los datos que la que se logra con las tradicionales cookies de terceros, puesto que su identidad no se ve expuesta. 

El problema según W3C, es que uniendo estos datos que el servidor ofrece a otros de los que disponga una empresa, se puede crear igualmente un perfil del usuario. Y lo que es peor. Podría, según apuntan desde TAG, seleccionar anuncios en función de otros aspectos sensibles como la raza o la religión de una persona. 

Topics, la propuesta de privacy sandbox para la publicidad basada en intereses, es el proyecto que sucedió a FLoC (Federated Learning of Cohorts), el sistema que la multinacional estadounidense había presentado para reemplazar a las cookies. Google había establecido su desaparición para 2022, pero finalmente no será hasta 2024 cuando esta forma de recopilar datos de los usuarios deje de funcionar. Las normativas relacionadas con la privacidad aprobadas, y las pendientes de aprobar en Europa han hecho que Google trabaje en buscar alternativas más respetuosas.