La guerra comercial se recrudece y Estados Unidos incrementa la presión sobre compañías chinas. Hace apenas cinco días el presidente estadounidense Donald Trump vetaba al gigante chino para el despliegue de las futuras redes 5G en la primera economía del mundo. Bien, pues la réplica no ha tardado en llegar y Alphabet, matriz de Google, […]
Dirigentes Digital
| 20 may 2019
La guerra comercial se recrudece y Estados Unidos incrementa la presión sobre compañías chinas. Hace apenas cinco días el presidente estadounidense Donald Trump vetaba al gigante chino para el despliegue de las futuras redes 5G en la primera economía del mundo. Bien, pues la réplica no ha tardado en llegar y Alphabet, matriz de Google, ha contraatacado y ha anunciado que deja a los smartphones chinos sin actualizaciones y sin acceso a la Store, es decir, sin aplicaciones.
Pero Google no es la única. Hoy mismo Intel, el mayor fabricante de procesadores del mundo, y otras firmas de microprocesadores como Qualcomm, Broadcom, Infineon Technologies, Micron Technology o Western Digital han suspendido el envío de chips Huawei. Por tanto, no sólo se verán afectados los smartphones, sino también otros dispositivos como ordenadores, portátiles y tabletas.
En la actualidad Huawei ocupa el tercer lugar en el escalafón mundial de ventas de móviles, pisando los talones a los Iphone aunque aún lejos de Samsung, líder mundial. Pero es cierto que en España Huawei ha conseguido arrebatar a la firma surcoreana y a Apple el primer puesto y en 2018 fue la que más teléfonos inteligentes vendió. Por lo tanto hay millones de posibles afectados.
Por eso, la pregunta que nos hemos formulado en Dirigentes es, ¿Cómo afecta esta decisión a los usuarios de un Huawei?
Por plazos
En el corto plazo, es decir hoy y los próximos meses, un usuario de un móvil Huawei no notará nada. Su terminal funcionará a la perfección.
Otra cosa es lo que ocurrirá cuando Google lance una nueva actualización de sus sistema operativo, cosa que a buen seguro tendrá lugar durante el presente 2019. En ese caso los que tengan un Huawei no podrán actualizarlo, con consecuencias en materia de rapidez de uso y brechas de seguridad
Seguridad
Precisamente la seguridad es una de las consecuencias más relevantes de esta batalla tecnológica.
Las actualizaciones solucionan problemas del uso normal del teléfono móvil, como la cámara, la conectividad a las antenas móviles, la conexión bluetooth y arreglan fallos de seguridad. De hecho, muchas veces se ejecutan teniendo en cuenta las advertencias y fallos que detectan los propios usuarios.
Sin APPs
Google no sólo es la reina de los buscadores, también es líder indiscutible en materia de aplicaciones. Esto supondrá que los propietarios de un Huawei no podrán utilizar algunas apps que han pasado a formar parte del día a día de los seres humanos, como el correo electrónico Gmail, el archipopular servicio de vídeos en streaming Youtube o la geolocalización propocionada por Google Maps.
Pero tampoco podrán tener acceso a las aplicaciones fabricadas por otros desarrolladores, ya que Google ha anunciado que vetará la entrada en la tienda virtual PlayStore, desde donde se descargan las apps a los teléfonos inteligentes.
Es cierto que hay otros lugares desde donde acceder a estas apps. Pero las cuotas de mercado de la filial de Alphabet rozan cotas monopolísticas. Más del 90% en España y más del 80% en el continente europeo utilizan la plataforma de PlayStore para descargar las apps que nutren a sus teléfonos.
Consecuencias económicas
La primera y a pesar de que aún no hay datos es evidente: descenso de las ventas de dispositivos de Huawei. Esta misma mañana ya se notaba mucha menos gente en las tiendas propias que Huawei posee en España. Habrá que ver el montante total y el impacto que tenga sobre la cuenta de resultados de la tecnológica china. Cabe señalar que Huawei Technologies no cotiza en los mercados de valores, por lo que no ha habido un gran descenso en la bolsa como cabría esperar en el caso de una compañía cotizada. Por cierto, no hay que confundirla con Huawei Culture, empresa del mundo del entretenimiento y que sí que cotiza en la bolsa de valores tecnológicos de China, el índice de Shenzen, el equivalente al Nasdaq de Wall Street.