Los líderes de la Unión Europea han puesto este sábado fin a semanas de disputas sobre los principales puestos en Bruselas y han acordado quién ocupará los principales cargos en las instituciones de la Unión Europea.
Tras el fiasco de la reunión de julio, se esperaba que este sábado los líderes de los 28 llegaran a un acuerdo. La ministra italiana de Asuntos Exteriores, la socialista Federica Mogherini, partía con todas las quinielas para ser designada nueva jefa de la diplomacia europea.
Por su parte, el primer ministro polaco, Donald Tusk, era el favorito para sustituir a Herman Van Rompuy como presidente del Consejo Europeo.
Y así ha sido. Aunque hace una semana el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, convenció a la canciller alemana Angela Merkel para que esta apoyara la candidatura de del ministro de Economía, Luis de Guindos, como próximo presidente del Eurogrupo, habrá que esperar para designar oficialmente este puesto.
Desde el gabinete de Van Rompuy se alega que la decisión corresponde a los propios ministros de Economía de la Zona Euro y no a los líderes europeos. El principal obstáculo para Guindos es ahora el actual jefe del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, cuyo mandato no expira hasta junio de 2015.
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