El Congreso de Argentina ha aprobado un proyecto de ley que establece un aporte extraordinario para financiar los gastos del Estado en la pandemia. La tributación alcanzaría a unas 9.000 personas que declararon bienes por 2,5 millones de dólares.

Conocido como “impuesto a los ricos”, el tributo apunta a recaudar 3.830 millones de dólares para “comprar equipamiento de salud (20%), apoyar a las pymes (20%), urbanizar barrios (15%), equipar a YPF (25%) y financiar a jóvenes para seguir estudiando (20%)”, informó la agencia Télam (estatal).

Debate

Las alícuotas son progresivas de acuerdo con el patrimonio, yendo del 2% al 3,5% para los residentes en Argentina y del 3% al 5,25% para argentinos en el exterior, excepto si repatrian sus bienes, con lo cual se les aplicará la primera escala. 

La iniciativa partió del diputado Máximo Kirchner (hijo de la vicepresidente, Cristina Fernández) y prevé que el aporte se realice por “única vez”, con carácter “solidario”. “No es un enfrentamiento con los que más tienen”, destaca el texto.

Los opositores argumentan que la ley desalentará inversiones además de promover la migración de ciudadanos hacia otros países. Tras su aprobación en Diputados, el proyecto va ahora a debate al Senado. 

Reservas

El Banco Central posee reservas por 28.365 millones de dólares, según informó este jueves (19) el ministro de Hacienda, Martín Guzmán, al explicar a senadores los fundamentos del proyecto de ley de Sostenibilidad de la Deuda Pública.

Tal legislación “establece que todo programa con el FMI deberá tener aprobación del Congreso”, dijo Guzmán, detallando que ello es parte del “proceso de ordenamiento y estabilización de la economía argentina”.

Su declaración se inscribe en las negociaciones que mantiene con el FMI en busca de un nuevo programa de crédito para saldar la deuda de 44.000 millones de dólares contraída por el gobierno argentino en 2018 y, eventualmente, solicitar más recursos para enfrentar la pandemia.