Prosegur Cash continúa con su expansión internacional. La compañía dedicada a la gestión de efectivo ha adquirido Logmais en Brasil, especializada en la prestación de servicios de depósitos y cobro.

Aunque la cotizada no ha especificado el precio de la operación, si han asegurado que ésta les va a permitir reforzar su posicionamiento como proveedora de soluciones de pago, según explica en una nota.

Se trata de una decisión que persigue "diversificar" los productos que ofrece en el segmento de nuevos servicios, un área que se ha configurado como un "eje estratégico" en el desarrollo de la compañía y que ya representa el 10% de su facturación total.

De hecho, las compras de nuevos servicios alcanzaron en 2017 los 167 millones de euros, un 50% más que en el ejercicio anterior. En concreto, este departamento registró 103 millones en Latinoamérica, impulsado por los servicios de automatización de la gestión de efectivo en el punto de venta, la externalización de procesos y el transporte internacional, principalmente.

Fundada en 2016 en la ciudad de Bahía, Logmais dispone de 57 establecimientos propios distribuidos en las regiones Nordeste y Sudeste del país. A esta cantidad también hay que sumar una red de 75 puntos de atención ubicados en edificios públicos y más de 800 establecimientos asociados en todo el país. Según sus propios cálculos, su plantilla asciende a 890 trabajadores y realiza más de 2,3 millones de transacciones al mes.

Dicho acuerdo se ha dado a conocer una semana después de entrar en el mercado asiático de la mano de APTI en Filipinas. En este caso, el marco de actuación pasa por introducir nuevas tecnologías, así como a mejorar la propuesta comercial en un país donde el sector bancario se encuentra en plena ebullición. Con 105 millones de habitantes, dispone de 11.000 sucursales y 20.000 cajeros automáticos.

De este modo, Prosegur Cash extiende su presencia a más de una veintena de países, ubicados en su mayoría, en América Latina, una región donde parecen apuntar casi todas las fichas de la empresa de gestión de efectivo. Antes de Brasil, el último movimiento tuvo lugar en centroamérica, donde alcanzó un acuerdo con el grupo Almo el pasado junio. Un pacto que supone extender su actividad a Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador y Costa Rica.