Siguiendo la misma tendencia de recuperación que el resto de ámbitos del turismo, tras la pandemia, los viajes de negocios han ido poco a poco reactivándose. El mundo de la ingeniería y la farmacia fueron los primeros en retomarlos y a estos les siguieron progresivamente el resto de sectores. Una muestra de este desarrollo queda patente en el elevado número de eventos internacionales de gran tamaño que han mantenido su actividad con normalidad a lo largo de 2022, tales como la Feria Internacional de Arte de Barcelona o el Mobile World Congress. 

En relación con esta última cita, el pasado mes de junio su organización apostó por mantener en la ciudad de Barcelona la celebración del principal evento de tecnología a nivel mundial hasta el año 2030. Según indican desde la compañía BizAway, Luca Carlucci y Michelle Pierri, “por el calibre del evento como fuente de ingresos en el sector de los viajes de negocios, este anuncio augura una recuperación total del turismo corporativo”. 

De hecho, también declaran que este desarrollo queda patente en el volumen de negocio que registran en su propia empresa. Prueba de ello es que de enero a septiembre de 2021 y 2022, su volumen de negocio ha aumentado un 332% y el número de reservas en un 289,1%. No obstante, alertan igualmente que la subida de los precios de alimentos y energía “es un componente que está afectando al desarrollo y estabilización del sector que augura mantenerse en niveles pre pandemia”.

Así las cosas, es importante preguntarse cuáles son en la actualidad las ciudades españolas y europeas más desarrolladas para acoger este tipo de turismo. En lo que respecta al escenario internacional, los expertos consideran que “las principales ciudades europeas son las que más actividad socioeconómica centralizan, y por ello se convierten en los destinos perfectos donde tienen lugar los viajes de negocios, así como el networking que tanto buscan los profesionales”. Es decir, estas son aquellas grandes urbes que cumplen con tres requisitos: albergan grandes empresas, ofrecen todo tipo de comodidades para este tipo de desplazamientos y están ubicadas en sitios estratégicos que facilitan los encuentros. París, Londres, Bruselas, Berlín, Múnich, Ámsterdam, Nueva York, México, Milán o Roma son algunos de los destinos principales que engloban esta lista.

Por su parte, a nivel nacional destacan Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao, Málaga y Zaragoza. No obstante, desde BizAway también subrayan la importante presencia de las islas, tanto en Baleares como Canarias, gracias a las oportunidades de trabajo en remoto que tienen a disposición de los visitantes con las que los trabajadores pueden mantener la responsabilidad laboral sin dejar de lado la posibilidad de conocer un nuevo destino. “Especialmente desde que las empresas ofrecen teletrabajar en estos destinos, se han convertido en los preferidos para los trabajadores que hacen bleisure o simplemente se van de vacaciones”, comentan.

Por todo ello, a la hora de seleccionar un lugar donde alojarse, tanto los conocidos como nómadas digitales, como aquellos trabajadores que se dirigen a un destino tan solo unos pocos días, necesitan unas instalaciones adecuadas que van más allá de una simple conexión a Internet. En esta línea, dichos emplazamientos deben contar con ciertas comodidades “que permitan ejecutar las tareas diarias de forma óptima, sin que ello se convierta en un problema”, declaran los expertos de BizAway. Así, algunos de los aspectos básicos a tener en cuenta son:

• Sala de reuniones. Con el objetivo de mantener la privacidad de los encuentros, es importante contar con un espacio exclusivo donde atender y recibir a las personas de forma presencial o mediante una videollamada. 
• Buena conexión a Internet. Desde BizAway destacan que no solamente es importante tener una buena conexión, sino que lo deseable es contar con fibra óptica. Internet es la herramienta principal de trabajo de la mayor parte de las personas, por lo que es especialmente importante disponer de un acceso a la red de forma rápida que permita trabajar con velocidad y total comodidad.
• Habitación dotada con material de oficina. Una mesa de trabajo una silla cómoda, buena luz o luces secundarias como lámparas o flexos. Estos son los elementos que desde la organización consideran esenciales para optimizar un lugar de trabajo en la medida en que “contar con un espacio estratégicamente organizado, impactará de forma directa en el rendimiento laboral, así como en el bienestar mental”.
• Ocio y entretenimiento. Instalaciones como gimnasio, piscina o spa son cada vez más demandadas por los turistas de negocios ya que, tras una jornada laboral, “ocupar la mente con actividades que faciliten la secreción de endorfinas nos permite descansar y rendir mucho mejor día tras día”.