El Índice de Precios de Consumo (IPC) ha registrado un incremento del 2,2% durante el mes de julio, una décima menos con respecto al mes anterior, impulsado por la bajada del precio de los alimentos y las bebidas no alcohólicas.

Según el indicador adelantado este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), esta cifra significa que los precios son un 2,2% superiores a los de hace un año, pero una décima menor a los contabilizados el pasado mes de junio, cuando el indicador se situó en el 2,3%.

De confirmarse dicho incremento, sería la vigésimo tercera tasa positiva del IPC que se produce de manera consecutiva. Tras cerrar enero con una ligera subida del 0,6%, los precios siguieron su escala ascendente durante los meses posteriores, con aumentos superiores al 1% en febrero, marzo y abril, mientras que en mayo, junio y julio el repunte ha sido por encima del 2%.

En tasa mensual, los precios del consumo han experimentado un descenso del 0,7% en comparación con el mes de junio, tendencia similar a la producida en el mismo período de 2016 y 2017.

Por su parte, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) adelantado ha registrado un descenso del 1,2% en el séptimo mes del año. En cualquier caso, los datos definitivos saldrán el próximo 14 de agosto.