Hace un cuarto de siglo el renting era residual en España. En 20 años podría conquistar el 30% de los vehículos matriculados en nuestro país, una flota estimada de más de medio millón de vehículos. Así lo ve Agustín García Gómez, presidente de la Asociación Española de Renting de Vehículos.

¿Qué factores debe de considerar una compañía antes de cerrar un contrato de renting?

El renting es un servicio que pone toda la gestión del vehículo en manos de una compañía de renting. Además, todos los riesgos implícitos en la propiedad, los asume la compañía de renting. Le va a dar un valor residual alto, va a comprar el vehículo, lo va a vender como usado, le va a dar el mantenimiento, el seguro, los impuestos. En esto difiere del leasing, que es una operación financiera, mientras que el renting se ocupa de toda la gestión del vehículo. Una de las principales ventajas es que el vehículo es propiedad de la compañía de renting y el bien no tiene que activarse, se contabiliza como gasto la cuota que paga, salvo las compañías cotizadas que a partir de 2019 van a tener que activar parte como derecho de uso.

¿Qué atractivo tiene el renting para las pymes?

Nosotros somos compradores al por mayor de vehículos y servicios de mantenimiento, por lo que obtenemos grandes descuentos, de una media del 20%. Esos descuentos se los trasladamos al cliente desde el punto de vista del precio. Una pyme se quita la incertidumbre ante la compra de un vehículo, ya que la cuota de un renting incluye el mantenimiento y la reparación, por lo que puede hacer una planificación perfecta de sus gastos si se atiene a las condiciones del contrato. No va a tener imprevistos, solo va a tener una factura y un único interlocutor.

La pyme tiene un negocio del que entiende y pone algo que no es estratégico para su negocio, como son los vehículos, en manos de especialistas para poder dedicar su tiempo al desarrollo de su negocio. Además, obtiene ventajas fiscales, ya que se trata de un gasto deducible en el uso que se da al vehículo en la parte empresarial.

¿Tenemos cifras similares a otros países?

España entró tarde al negocio del renting. Los primeros que lo trajeron, allá por el año 85, fueron las empresas multinacionales, cuando en otros países llevaba un desarrollo de unos 15 o 20 años. El renting empezó a coger fuerza en el año 2000. Estamos creciendo a mayor ritmo que otros países, aunque aún no hemos llegado a sus volúmenes. Nosotros estamos en torno al 18% de matriculaciones. Países como Reino Unido u Holanda pueden estar en torno al 35%. Sin embargo, estamos por delante de Italia en cuanto a la relación de matriculaciones en renting con respecto al total. Estamos todavía a unos 4 o 5 puntos de Alemania, Bélgica y Francia. Nos situamos en la parte media-baja de la zona occidental de Europa. Llegaremos a sus niveles en 6 o 7 años y nos podremos posicionar cerca del 24%.

¿Ese crecimiento se canalizará a través de la gran empresa, las pymes o los particulares?

Los mayores crecimientos están viniendo últimamente por la pequeña empresa y los particulares y autónomos. El crecimiento a partir de ahora vendrá por ahí y es mucho más esperanzador porque la base de clientes es mucho más amplia. Estamos en un momento dulce, con posibilidad de crecer este año a dos dígitos.

De los grandes clientes, todos conocen el renting y entre el 80% y el 90% lo utilizan. Si el crecimiento en el primer trimestre ha sido del 72%, la potencialidad que tenemos es enorme. Este año preveíamos crecer un 7%, pero vamos a crecer por encima del 10%, lo que quiere decir que crecemos por encima de nuestras expectativas. Cuando venimos de crecimientos fuertes, debemos consolidar, por eso nos hemos quedado cortos; pero el número de clientes se está incrementando ahora de forma importante. El cliente de renting suele empezar con uno o dos vehículos, pero en cuanto llega el momento amplía su flota, que es lo que está ocurriendo ahora.

¿Qué valoración hace del renting a 20 años vista?

Yo empecé en el renting en el año 92. En la asociación estoy desde el 2000. He visto que el producto es ligeramente distinto del que teníamos entonces, más tradicional. Se vendía a un plazo fijo y era mucho más rígido, lo que contrasta con el renting flexible. Hoy día, se va a ver al cliente y se hace un estudio de movilidad y se le ofrece un mix. Ese es un avance cualitativo. En 2015 teníamos 55.000 clientesde renting y vamos a terminar en 2018 con 140.000. Antes era la gran empresa la que sostenía el volumen de negocio, pero ahora ya son las pymes, autónomos y particulares el futuro y los que están sosteniendo el crecimiento en la última etapa. Eso es muy alentador, porque el renting se ha popularizado, ya no es exclusivo de las grandes empresas. Ya no nos limitamos a un segmentode clientes, sino que es una base amplísima, lo que implica unavance espectacular. En 1998, en España, el renting representaba el 3,36% de todas las matriculaciones, en un año en el que se matricularon 1.475.000 vehículos. El año pasado, con un volumen global un poco menor de matriculaciones, se superó el 17%.

¿Y qué valoración hace a 20 años vista?

Esto no tiene un crecimiento infinito, pero yo me conformaría con llegar al 30% del total de matriculaciones de vehículos en 2038. Visto desde hoy, no sé qué ocurrirá, pero este sería un dato bastante importante. Estamos en millón y medio de vehículos yunos 250.000 son de renting. Si en 2038 se matriculan dos millones, el 30% sería 600.000, por lo que habría que doblar el número de vehículos de renting para esa fecha. Lo que queremos es estar aquí para verlo.