España es uno de los destinos preferidos por los viajeros. Antes de la llegada de la pandemia recibía 83 millones de visitantes, un número al que solo le superaba Francia, con 89 millones, y se colocaba por delante de otros destinos como Estados Unidos (79) o Italia (64). Teniendo en cuenta las cifras alcanzadas en 2019, el turismo representó la principal fuente de ingresos de la economía española, un 12,4% de su PIB y, sus ingresos, supusieron un valor de 154.000 millones de euros.

Meses más tarde, la llegada de la crisis sanitaria se llevó por delante estos números. Según la información aportada por la compañía de seguros de crédito, de caución y de servicios asociados a la gestión del riesgo comercial Solunion, en 2020 la actividad de esta industria cayó en 116.000 millones de euros, -75,4% respecto a 2019, y su aportación al PIB también descendió del 12,4% a un 5,9%. De igual manera, el número de extranjeros que visitaron nuestro país experimentó una caída del 77% al recibir 20 millones de visitantes durante el año de la pandemia y ser adelantado por otros territorios como Italia, México, Estados Unidos o Rusia.

En este contexto, el sector turístico se trata de un ámbito en el que históricamente ha registrado poco volumen en cuanto a presentación de concursos de acreedores. No obstante, tal y como resaltan desde la compañía, 2020 sufrió un “importante” incremento respecto a 2019, un 43%, que afectó, principalmente, a las pymes. Por su parte, ya entrados en 2021, a pesar de la relajación de las restricciones de movilidad, la progresiva reducción de las medidas de aforo y el avance de la vacunación, el número de empresas relacionadas con esta industria se ha visto reducido.

Siguiendo esta línea, tal y como destaca un informe elaborado por Solunion, con datos a cierre de 2021, el documento refleja un aumento del 62% de los concursos respecto a 2020. En relación con los territorios afectados, destacan Cataluña y Canarias. En ambos casos doblaron las cifras de 2020. Por su parte, otras comunidades autónomas como Madrid o la Comunidad Valenciana “mostraron un crecimiento más gradual”. Y, en el caso de Baleares, “con un mismo modelo económico, mantuvo prácticamente la misma cifra registrada hace dos años”.

Así las cosas, según reflejan los datos de un informe elaborado por Exceltur, y facilitados por Solunion, el PIB turístico en 2021 ascendió hasta los 88.546 millones de euros. Esta cifra supone un incremento de 27.140 millones respecto 2020, aunque todavía se sitúa muy lejos de los cerca de 154.000 millones de euros alcanzados durante el último ejercicio previo a la pandemia. Tal y como comentan, la llegada de la variante ómicron ralentizó la recuperación del sector durante los últimos meses del año y no se espera que la tendencia cambie en el primer trimestre de 2022. 

De la mano de estos datos con un tinte pesimista, los analistas de la firma indican en una nota que “la gran mayoría de actores emplaza la recuperación para 2023, empeorando las previsiones de hace unos meses”. Además, también dejan a un lado la posibilidad de alcanzar las cifras registradas en 2019 a lo largo de este año que acaba de arrancar y consideran que la llegada de la Semana Santa, unida a una buena evolución de la pandemia, serán las encargadas de marcar “un posible nuevo punto de inflexión y la vuelta a la tendencia iniciada a mitad de 2021”. Hasta entonces y mientras se vaya recuperando el turismo extranjero, los viajes dentro del interior de España seguirán siendo “primordiales”.

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