El aumento del gasto social del que se vanagloria el Gobierno de Pedro Sánchez conlleva la introducción de nuevas figuras impositivas, así como el aumento de algunos que ya existen. Es una regla matemática: si se gasta más, se debe ingresar más. De modo que esos gastos correrán a cargo de rentas altas y empresas con facturaciones altas.

En ese intento que el Gobierno llama “fiscalidad más justa y progresiva”, se contempla una subida de dos puntos del IRPF en las bases imponibles para las rentas superiores a 130.000 euros, mientras que las superiores a 300.000 euros anuales enfrentarán una subida de cuatro puntos. Además, subirá en 4 puntos el tipo de IRPF aplicable a las rentas del ahorro superiores a 140.000 euros. Con esas medidas, el Gobierno calcula que la recaudación crecerá en 328 millones de euros.

Por otro lado, los presupuestos presentados por la titular de Hacienda, María Jesús Montero, incluyen algunas reducciones, como son la del impuesto de sociedades para las empresas que facturen menos de un millón de euros. En ese caso, el tipo desciende al 23%. El impacto de esa medida está cifrado en una reducción de los ingresos por ese impuesto de 260 millones de euros.

En cuanto a las grandes empresas, el tipo mínimo asciende al 15%, mientras que el de banca y empresas de hidrocarburos será del 18%. Según el Gobierno, la recaudación del Impuesto de Sociedad aumentará en un 14,1%, hasta alcanzar los 27.579 millones de euros. Por otra parte, se reduce del 100% al 95% la exención sobre dividendos y plusvalías.

En el capítulo de los nuevos ingresos, se encuentra el nuevo impuesto sobre transacciones financieras. Con él, Hacienda prevé contar con 850 millones de euros más. En lo que respecta al denominado como “impuesto sobre determinados servicios digitales”, el impacto se cuantifica en 1.200 millones de euros.

En cuanto al IVA, habrá rebajas para que el tipo se sitúe en el 4% en los productos de higiene femenina, y también en libros, periódicos y revistas en formato electrónico. Por su parte, los servicios veterinarios quedaron en el 10%. Así, estas rebajas en el IVA supondrán un impacto en la recaudación de 67 millones de euros. En este gráfico de Statista se puede ver la distribución de los ingresos a través de los distintos tipos de impuestos.