Hace ya más de cuatro años que Naciones Unidas aprobó la Agenda 2030 y, por consiguiente, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Con esto se busca poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar que todas las personas gocen de paz y prosperidad. El sector privado, las organizaciones de la sociedad civil y todas las empresas están llamadas a cumplirlos. Y, cómo no, las pequeñas y medianas empresas (Pymes) tienen una gran responsabilidad, al configurar el 99% del tejido empresarial español.

Este marco no sólo proporciona la oportunidad de las pymes para mejorar el escenario, sino que también presenta un nuevo abanico de oportunidades. Ya lo dijo el vicepresidente de Un Global Compact y ex director general de Unilever, Paul Polman: “Es la mayor oportunidad económica de los últimos tiempos”.

Reorientar los flujos de capital hacia inversiones sostenibles o evaluar y gestionar las consecuencias de sus acciones son algunas de las medidas que pueden tomar las pymes para obtener un beneficio. Pero, ¿Cuáles serían? Aquí van seis oportunidades de negocio al cumplir la Agenda 2030:

1. Acceso a nuevos mercados: Contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible permite a la pyme acceder a nuevos segmentos de mercado que serán claves en la economía del futuro”, detalla una guía editada conjuntamente por la la Red Española del Pacto Mundial, el Consejo General de Economistas de España y la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme). Estos podrían ser las nuevas tecnologías, la economía circular, los negocios inclusivos, las energías renovables y la economía ecológica.
2. Mejora de la reputación: Una mayor preocupación por el desarrollo sostenible implicará un aumento eficaz en la confianza de la marca y, por consiguiente, en las ventas. Ya existen multitud de casos que demuestran la efectividad del posicionamiento como empresa comprometida con aspectos sociales y medioambientales. De hecho, el 64% de los consumidores españoles tiene en cuenta en sus compras, casi siempre o a veces, la sostenibilidad, según la Red Española del Pacto Mundial.
3. Adelantarse a normativas: El marco legislativo en el que se adentrarán las empresas será cada vez más comprometido con la sostenibilidad: algunas de las nuevas políticas a introducir serán la futura Estrategia de Desarrollo Sostenible, la Ley de cambio climático y transición energética, el Plan Nacional de Empresas y Derechos Humanos o el nuevo Plan de Acción de la Unión Europea sobre Finanzas Sostenibles.
4. Contratos con el sector público: Tomar medidas en torno a los ODS contribuirán a una mayor accesibilidad de subvenciones o contratos con la administración pública. Algunas de estas acciones abarcan, entre otras, reducir el nivel de emisión de gases de efecto invernadero, medidas de ahorro y eficiencia energética, la implantación de un plan de igualdad de género o la aplicación de criterios éticos y de responsabilidad social a la prestación contractual.
5. Negocio con grandes organizaciones: Las grandes empresas “invierten cada vez más en sostenibilidad y evalúan y exigen estas cuestiones a sus empresas proveedores”, explican desde el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Y es que un análisis de la Red Española del Pacto Mundial apunta que el 80% de las empresas del IBEX 35 ya realizan acciones para contribuir a los ODS y el 71% evalúan a sus proveedores bajo criterios sociales.
6. Ahorro de costes: Casi el 70% de las empresas implanta acciones de sostenibilidad con el objetivo de reducir costes, tal y como se desprende de un informe elaborado por Cox Conserves. Este ahorro puede venir, por ejemplo, desde el coste energético y de agua.