Tras la irrupción de la crisis sanitaria, ha habido un antes y un después en el mundo tal y como se conocía. Fruto de esta pandemia, se han replanteado las necesidades de la economía y de la sociedad y tendencias como la innovación o la digitalización han pasado a ser obligatorias como apuntan muchos expertos. También ha quedado demostrado el papel de la ciencia y, concretamente, la industria farmacéutica en la carrera por conseguir una vacuna eficaz y medicamentos para combatir al virus. 

El presidente de la farmacéutica Lilly en España, Portugal y Grecia, Nabil Daoud, ha destacado en un evento organizado por Executive Forum la importancia de su sector en el momento actual: "La industria farmacéutica es y puede ser un motor económico clave en España" y, para ello, argumenta que se trata del sector industrial que más invierte en I+D en este país con alrededor de 1.200 millones de euros anuales, "lo que nos posiciona en el primer puesto de todas las industrias a nivel económico, casi al doble del sector aeronáutico o casi cinco veces lo que destina el ámbito informático y electrónico". 

Daoud considera que lo más importante de estas inversiones es que aportan soluciones a los temas de salud más graves y "lo hemos aprendido este año de manera muy dolorosa", y añade que una población sana y con libertad de movimiento es la "condición esencial para tener una economía próspera y poder avanzar como país".

Recientemente, las farmacéuticas Pfizer y BioNTech han anunciado que su vacuna contra el coronavirus ha demostrado ser "eficaz en un 90%". Una noticia que ha arrojado un poco de luz al final del túnel. En línea con las palabras de Daoud, el presidente y director general de Pfizer en España, Sergio Rodríguez, ha recalcado que, como compañía biofarmacéutica, son conscientes de la repercusión que tiene la colaboración de los actores para salir de esta situación y, particularmente, apunta a que tienen una "gran responsabilidad" en este sentido porque "saldremos de esta crisis gracias a la ciencia y la innovación". 

Rodríguez asegura que, como industria, desempeñan un papel que tendrá que ver con la reactivación económica de España y, de ahí, la importancia de invertir en I+D. Y también apunta a su capacidad de exportación: "La industria farmacéutica es el cuarto sector con una capacidad de exportación de 12.000 millones de euros en España y un crecimiento del 13%, un factor importante para salir de la crisis, además, somos líderes en producción y exportación de alta tecnología con un 25% del total y, finalmente, el peso de la producción farmacéutica dentro de la economía española es del 1,2% del PIB". 

Considera que la vía para continuar aportando a la salud y al país es seguir invirtiendo en este desarrollo, pero dice que, para ello, lo que precisan es un entorno regulatorio estable.  

El evento también contó con la participación de la secretaria de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Ana de la Cueva, a quien los líderes de Lilly y Pfizer reiteraron la necesidad de destinar más presupuesto a impulsar la I+D porque, según Nabil Daoud, "es esencial que el sector farmacéutico siga innovando y prosperen los proyectos en los que están trabajando", Además de esto, otra de las ideas en las que coinciden los dirigentes es en la necesidad de fomentar la colaboración público-privada para salir de la crisis ya que "salud y economía van de la mano".