La compañía de Sillicon Valley cambia su estrategia de ventas. El último movimiento de Tesla pasa por cerrar sus tiendas físicas para concentrarse en las ventas exclusivamente a través de Internet. Esta decisión llega de la mano del lanzamiento del Model 3 cuyo precio base se sitúa en los 35.000 dólares (algo más de 30.800 euros).

El cierre de los concesionarios, con los consecutivos ahorros en costes que eso genera, ha posibilitado, según explica Tesla en un comunicado, reducir todos los precios de sus vehículos un 6% de media y un modo de conducción “totalmente autónoma” a lo largo de 2019. Este proceso se dará en los próximos meses, pero ha subrayado que un pequeño número de tiendas permanecerán abiertas y transformadas en “galerías, escaparates y centros de formación”.

El hecho de vender online sus automóviles representa una ventaja en el sentido de que “puedes comprar ahora un Tesla en Norteamérica a través de su móvil en un minuto y esa capacidad estará disponible en todo el mundo pronto”, indicó la compañía.

De hecho el presidente ejecutivo Elon Musk en marzo de 2016, prometió comercializar a ese precio el automóvil, una reducción que llega tres años después, todo con el objetivo de atraer al mercado. Pero han sido necesarios tres años para lograr venderlo a este valor y actualmente su precio oscila los casi 43.000 dólares (euros). Pese a este modelo “low cost”, el fundador señaló que no espera que la compañía obtenga beneficios durante el primer trimestre del año.

Las nuevas unidades del Model 3 de Tesla alcanzan una velocidad de hasta 210 km/h y logra pasar de 0 a 96 km por hora en tan solo 5,6 segundos. Y aunque tenga un precio más económico está pensado para obtener la misma clasificación de seguridad que las versiones que tienen mayor autonomía.