En un comunicado remitido a la CNMV, Telefónica ha explicado en relación con la decisión de la Comisión Europea de prohibir la venta de la filial de Telefónica en Reino Unido, O2 UK al Grupo Hutchison Whampoa, que en "ocasión de la publicación de resultados del primer semestre de 2016, las operaciones de Telefónica en el Reino Unido dejarán de reportarse como operación en discontinuación dentro del Grupo Telefónica y sus activos y pasivos como "mantenidos para la venta", pasando a reportarse línea a línea por el método de integración global en los estados financieros del Grupo Telefónica, conforme a las NIIF". Además, "los resultados comparativos se reportarán siguiendo este mismo criterio".

En su nota, Telefónica advirtió de que continúa analizando "alternativas estratégicas" para la filial, pero que esperará a que las condiciones del mercado "sean oportunas".

El grupo podría optar por vender su negocio británico a un fondo u otro operador interesado, ejecutar una venta parcial mediante una salida a bolsa, fusionarlo con un competidor o mantener la compañía en cartera.

El Ebitda de O2 fue superior a los 1.800 millones de euros en 2015, aunque la devaluación de la libra tras el anuncio del Brexit previsiblemente dañará esta cifra por el efecto divisas. Hasta marzo, O2 había mejorado su Oibda, margen de Oibda y su flujo de caja operativo, dijo el grupo.