Los ministros de Finanzas del G20 han acordado dar un impulso para coordinar internacionalmente los impuestos para las grandes tecnológicas, con miras a tener un informe definitivo para el próximo año.
Reunidos en Japón, los ministros de las 20 principales economías del mundo dieron un paso adelante al reafirmar la importancia de que se implemente globalmente un paquete sobre este asunto que ya había propuesto la OCDE.
«Aplaudimos los recientes avances para atajar los desafíos tributarios que surgen de la digitalización y respaldamos el ambicioso programa», dijeron en un comunicado. «Redoblaremos nuestros esfuerzos para una solución basada en consenso con un informe definitivo para 2020», añadieron.
Los impuestos a las grandes tecnológicas como Google, Amazon o Facebook a menudo se han convertido en un polémico asunto en varias regiones del mundo, donde sus detractores critican que pagan una baja carga fiscal por los beneficios que obtienen.
En la Unión Europea, donde después de varios años sigue sin haber consenso para aplicar este tipo de tributo en el conjunto del bloque, algunos países piden que se grave a estas compañías para evitar que utilicen países con bajos impuestos como base para sus operaciones.
El Gobierno español, por ejemplo, anunció una ‘tasa Google’ de ámbito nacional, aunque algunos analistas dudan tanto de su aplicación a causa de la falta de apoyos políticos para llevarla a cabo, como de que alcance sus objetivos de recaudación.
Francia, Italia, Austria, Alemania están en la línea de España respecto a este asunto, mientras otros países del bloque que han como Irlanda, Suecia, Finlandia y Dinamarca se oponen.
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