Las actas de la Fed de ayer señalaron nuevamente el compormiso del banco central de la potencia para luchar contra la inflación e insistió en que no descarta no descartó subidas de los tipos mayores que las aprobadas si el contexto así lo requiriera. El parqué de Wall Street cerró ayer con ligeros avances.
Cabe recordar que en su última reunión de junio, la Reserva Federal ya elevçó los tipos en 75 puntos básicos, rompiendo su política monetaria moderada y la subida más alta del banco central de la potencia en los últimos 28 años.
En la mente de inversores y mercados está la recesión o desaceleración económica a la que puede llegar la economía global si el aterrizaje suave de ese endurecimiento monetario no se produce de esta manera.
Por otro lado, la dimisión de Boris Johnson ha sido la noticia del día. "La incertidumbre política suele ser un lastre para los resultados económicos por sí sola: pesa sobre el sentimiento y suele frenar las decisiones de inversión de las empresas", señalan desde la gestora Federated Hermes. No obstante, indican que el país se enfrenta a otra cuestión de mayor importancia, los desafíos económicos extremos: "la economía del Reino Unido no recuperó por completo sus pérdidas relacionadas con el Covid hasta principios de 2022, justo cuando se produjo una nueva crisis de estanflación por la guerra de Ucrania; la persistente y creciente inflación impulsada por los costes ha erosionado los ingresos reales; y la confianza de los consumidores, que se encuentra en un mínimo histórico, y las incipientes grietas en la confianza empresarial sugieren que los riesgos de recesión han aumentado en los próximos trimestres", detallan.
2022-07-07 15:45:47
