Supermartes: Biden y Trump ante el reto de una deuda pública de 34 billones

Opinión de Manuel Pinto, analista de XTB

Llegamos a una de las fechas más importantes en el calendario político de Estados Unidos, el ‘Supermartes’, día en el que el mayor número de estados del país celebran sus primarias presidenciales. Como suele pasar con los presidentes, Biden ha dominado las primeras elecciones primarias del Partido Demócrata y no se enfrenta a ningún rival de calado. Pero según las últimas encuestas, la mayoría de los partidarios del presidente en 2020 ahora piensan que es demasiado mayor para ejercer un nuevo mandato en plenas facultades debido a sus 81 años. Por su parte, Donald Trump ha conseguido la victoria en todas las primarias hasta ahora.

Analizando desde la lejanía, lo cierto es que puede parecer que envidiamos la situación económica del país, pero no es oro todo lo que reluce. Una de las mayores críticas a su gobierno está siendo en política exterior. Por un lado, parte de la población le reprocha las fuertes ayudas económicas y armamentísticas a Ucrania y la postura de debilidad de la mayor potencia del mundo en Oriente Medio. Según sus detractores, la causa de todos los problemas en Medio Oriente, y de hecho en el mundo entero, es la supuesta ‘debilidad’ del presidente. Y mientras intenta convencer de un alto al fuego sin éxito a Netanyahu, actual presidente isarelí, también debe estar atento a lo que hace Rusia en Ucrania y Europa del Este; China en el Estrecho de Taiwán y el Mar de China Meridional; y Corea del Norte en su península.

Con la economía estadounidense en auge, el mercado laboral creciendo y la inflación desacelerando, la confianza del consumidor ha girado a la baja. Algunos ciudadanos no perciben estas caídas en las cifras finales de los precios. Es verdad que en los últimos cuatro años, la gasolina ha subido un 30%, mientras que la electricidad, el gas, los vehículos, la comida y la vivienda, entre otros, suben más de un 20%. Sin embargo, los sueldos y salarios han aumentado más que los precios casi todos los meses desde principios de 2021. El valor de los sueldos de los trabajadores ha aumentado un 22% desde que Biden asumió el cargo en enero de 2021, superando el aumento de los precios en casi cinco puntos porcentuales. Parece que los episodios históricos en el alza de los precios se mantienen en la memoria de la población y sólo el paso del tiempo podría ayudar a borrarlo.

El gran lunar de la administración Biden es la facilidad de acceso a la vivienda, considerada la peor en décadas. El precio medio de la vivienda crece hasta sus máximos, a lo cual se ha sumado las altas tasas hipotecarias, que han llegado a tocar máximos desde el año 2000, y un stock de viviendas en mínimos, haciendo imposible su adquisición, sobre todo para los más jóvenes.

El mercado esperaba una recuperación del sector este año gracias a una política monetaria más “dovish” por parte de la FED, pero el programa de recortes de tipos esperado para este año queda lejos de las proyecciones de los últimos meses y ya empezamos a ver las primeras voces que estiman que ni siquiera habrá un recorte en los tipos de interés durante los próximos meses.

Otro de los principales focos de preocupación está siendo el sector inmobiliario comercial. Los bancos medianos y pequeños del país, que ligaron gran parte de sus ingresos a préstamos de oficinas y residencial multifamiliar, están generando un gran riesgo sistémico y en las últimas semanas hemos visto momentos de alta volatilidad en el sector, muy parecidos a los ocurridos hace 12 meses que terminaron con la quiebra de Silicon Valley Bank y Silvergate Capital entre otros, en lo que ha sido la mayor crisis bancaria desde 2008.

Pero si hablamos de riesgos, tenemos que poner el foco sobre el preocupante incremento de la deuda del país. La deuda nacional de Estados Unidos es actualmente de 34 billones de dólares americanos. Es el mismo valor que la suma conjunta de deuda entre China, Alemania, Japón, India y Reino Unido. Y en estos momentos aumenta 1 billón de dólares cada 100 días. Los retrasos en los acuerdos por el techo de deuda llevaron a las agencias de rating a rebajar su calificación de la deuda del país, un punto por debajo de la nota más alta, lo cual incrementó la rentabilidad de los bonos y por tanto los intereses de la deuda.

En los últimos años Biden ha puesto en marcha un ambicioso plan conocido como ‘Bidenomics’, consistente en aplicar mejoras importantes del anterior programa denominado ‘Obamacare’, acercando la cobertura médica universal a un mayor número de personas, alivio de la deuda estudiantil, grandes gastos en infraestructura, promoción a gran escala de semiconductores y una fuerte inversión en energía verde que han llevado a un aumento en la inversión manufacturera. La administración también creó incentivos financieros para los productores de petróleo y el resultado es que la producción de crudo estadounidense está en un nivel récord y el país se ha convertido en el mayor exportador de petróleo y gas del mundo, generando plusvalías récords para las compañías de la industria.

Muchas voces advirtieron que se estaba extralimitando, que la economía pagaría un alto precio, y es cierto que la deuda actual supera el 120% del PIB. Sin embargo, el tamaño de la deuda en relación con el PIB se ha reducido en 4 puntos porcentuales bajo su mandato. El salto considerable de la relación deuda/PIB se produjo principalmente al comienzo de la pandemia, antes de que él asumiera el cargo, es decir, con Donald Trump en el cargo.

2024-03-05 15:32:20
Add a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *