El miedo se ha apoderado también de la primera potencia mundial tras los sangrientos atentados de Paris. La seguridad se ha reforzado y, en ciudades como Nueva York, caminar por las zonas más turísticas o lugares donde se concentra mucha gente como estaciones de metro, autobús o tren, es toparse con numerosos soldados armados, servicios […]
Dirigentes Digital
| 20 nov 2015
El miedo se ha apoderado también de la primera potencia mundial tras los sangrientos atentados de Paris. La seguridad se ha reforzado y, en ciudades como Nueva York, caminar por las zonas más turísticas o lugares donde se concentra mucha gente como estaciones de metro, autobús o tren, es toparse con numerosos soldados armados, servicios especiales de seguridad y el triple de policía que en un día normal. Todo ante la posibilidad de que el Estado Islámico atente contra uno de sus mayores enemigos, Estados Unidos.
Seguridad férrea
Tras la tragedia en Paris, los terroristas han amenazado a Estados Unidos. Los yihadistas han señaladodirectamente a la capital estadounidense, que ha reforzado sus medidas de seguridad ante un posible atentado. Las patrullas de policía han aumentado alrededor de los edificios federales en Washington DC, y se ha pedido a los trabajadores del Capitolio que den cuenta de cualquier irregularidad o acción sospechosa. Sin embargo, el Congreso ha enviado un memorándum a los funcionarios diciendo que no se conoce ninguna amenaza específica contra el edificio del Capitolio.
Aún asíla seguridad se ha intensificado a lo largo y ancho del país. Jack Devine, que pasódécadas en la CIA, explicaba que "hay un millón de blancos fáciles en Estados Unidos y una gran cantidad de armas de fuego disponibles". "Somos extremadamente vulnerables y un objetivo de alto valor", seguía Devine."Tener los oficiales de seguridad a la vista, con armas visibles, podría amedrentar a alguien que quiera lanzar un ataque", comentaba Don Borelli, ex agente especial del FBI, y vicepresidente de la empresa de seguridadSoufanGroup.
El actual director de la CIA, John Brennan, comentaba a los medios que lo de Paris no lo considera un hecho aislado y prevéque "no sea la única operación que el ISIS tiene en proyecto".
En Nueva York el Departamento de Policía también ha reforzado la seguridad con más de 500 oficiales repartidos por las zonas calientes de la ciudad, 100 agentes de lucha contra el terrorismo y ocho unidades de K9 con perros adiestrados para detectar explosivos. A esto hay que unir militares de la Guardia Nacional que están trabajando conjuntamente con la policía local. La vigilancia es especialmente fuerte en estaciones de metro, autobuses y trenes, como reconocía el gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo. Oficiales revisan aleatoriamente mochilas y paquetes de viajeros antes de entrar a las estaciones. "La seguridad de los neoyorquinos y visitantes en nuestro estado es nuestra prioridad número uno, por esoestamos permanentemente vigilantes", añadía Cuomo.
Los aeropuertos también han doblado sus medidas de seguridad. Aún asíel pánico es latente y hace unas horas dos vuelos de Air France con destino Paris han sido desviados por amenazas de bomba, según comunicaron las autoridades. El que partía desde Los Ángeles ha realizado un aterrizaje de emergencia en Salt Lake City y el que despegaba en Washington fue desviado a Canadádonde aterrizósin problemas.
Unión de los líderes del G20 frente a los terroristas
"Es posible que una organización como el Estado Islámico, con una ideología tan retorcida y sin respeto por las vidas inocentes, tenga la capacidad de golpear de nuevo en Occidente", decía el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en la cumbre del G20 en Turquía. Obama y el presidente ruso Vladimir Putin dejaban a un lado sus discrepancias y mantenían una reunión de 35 minutos en privado para tratar la lucha contra el grupo yihadista en Siria. Ambos hablaron de una "transición política dirigida por sirios", precedida de "negociaciones bajo la mediación de la ONU", asícomo un alto el fuego. El presidente de Estados Unidos prometió, además, intensificar los esfuerzos para eliminar al Estado Islámico y evitar más ataques como el ocurrido en París. Obama ha defendido también su decisión de no enviar tropas terrestres a Siria y seguir con su actual estrategia para azotar a los yihadistas mediante bombardeos selectivos y con programas de entrenamiento a tropas en Irak. "Estados Unidos y sus aliados redoblarán los esfuerzos para encontrar una solución pacífica al conflicto en Siria y evitar que los militantes del Estado Islámico lleven a cabo otros ataques como el de París", sostuvo Obama. Además dijo que Estados Unidos trabajaría junto a Francia para hallar a los responsables de la masacre de Paris.
Refugiados sí, refugiados no
La polémica se ha desatado en Estados Unidos ante la llegada de refugiados sirios. Tras los ataques en Paris, más de la mitad de los gobernadores del país han pedido a través de una orden ejecutiva, evitar que los refugiados sirios lleguen a sus estados. Un acuerdo al que había llegado el presiente Obama con Europa en solidaridad ante la crisis de refugiados que vive el continente europeo. Barack Obama anunciaba en septiembre que su país permitiría la entrada a 10.000 sirios el próximo año. (Desde el año 2011 solo 1.500 refugiados procedentes de Siria han sido aceptados en Estados Unidos).
Los anuncios de los gobernadores se produjeron después de que las autoridades europeas revelaran que uno de los sospechosos involucrados en los ataques terroristas de París entróen Europa comorefugiado sirio.
La polémica estáservida y se ha encendido un debate sobre si acogerles o no. También se habla de si los estados tienen el poder de rechazar a personas en función de su nacionalidad.
Los gobernadores, 26 republicanos y uno demócrata, creen que entre los acogidos podría haber personas con vínculos terroristas.
"Puede haber quienes traten de sacar provecho de la generosidad de nuestro país y la capacidad de moverse libremente dentro de nuestras fronteras a través de este programa de reasentamiento federal, y debemos asegurarnos de que estamos haciendo todo lo posible para salvaguardar la seguridad de los estadounidenses", decía el gobernador republicano de Wisconsin, Scott Walker.
En Louisiana, el gobernador republicano Bobby Jindal firmóuna orden ejecutiva instruyendo a las agencias estatales a "tomar todas las medidas disponibles"para detener la reubicación de refugiados sirios en su estado.
El temor se ha apoderado de los ciudadanos y el gobernador de Michigan, Rick Snyder, decía que aunque el suyo "es un estado acogedor y nos sentimos orgullosos de nuestra rica historia de la inmigración, nuestra primera prioridad es proteger la seguridad de nuestros residentes". "La seguridad es lo primero", escribía en su cuenta de Twitter el gobernador de Texas, Greg Abbott, tras anunciar que su estado no aceptaría refugiados sirios. En una carta enviada al presidente Barack Obama, Abbott decía que"la compasión humanitaria estadounidense podría ser aprovechada para exponer a los estadounidenses a un peligro mortal similar al de Paris".
Además, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, ha instado a la Administración Obama a que suspenda la acogida de refugiados sirios en el país "hasta que no haya una certeza al cien por cien de que no supondrán un peligro".
La última palabra sobre este tema la tendráque dar el gobierno federal. Una decisión que espera con impaciencia el gobernador de Georgia, el republicano Nathan Deal, quien dijo que no aceptarárefugiados sirios "hasta que el gobierno y el Congreso lleven a cabo una revisión exhaustiva de los procedimientos del programa de reasentamiento actual y una verificación pormenorizada de antecedentes".
La respuesta de Barack Obama no se ha hecho esperar y ha sido clara. Ha arremetido contra aquéllos que discriminan a los solicitantes de asilo por motivos de religión, algo que consideró"vergonzoso". "Los valores que defendemos, los valores por los que luchamos contra el Estado Islámico, son precisamente que no discriminamos a la gente por su fe", decía Obama. "No matamos a gente porque son diferentes a nosotros. Eso es lo que nos separa de los terroristas", sentenciaba el Presidente de Estados Unidos.
Objetivo: la Casa Blanca
El pasado viernes, militantes del grupo Estado Islámico dieron a conocer un vídeo en el que amenazan con realizar ataques suicidas contra la Casa Blanca, así como nuevos atentados en Francia. El vídeo de seis minutos de combatientes del grupo yihadista en Irak celebra los ataques de la semana pasada en París, de acuerdo a una traducción del árabe entregada por el grupo de inteligencia SITE.
El director de FBI, James Comey, dijo el jueves que no estaba al tanto de ninguna amenaza creíble contra Estados Unidos del tipo de lo ocurrido en París. El portavoz del Departamento de Estado John Kirby dijo a la cadena CNN que se estaba examinando el vídeo del jueves para determinar su veracidad. "El Gobierno de Estados Unidos toma estas amenazas muy en serio", destacó, en declaraciones recogidas por Reuters.
El vídeo muestra a un integrante de EI amenazando con "destruir" los monumentos franceses y atacar la Casa Blanca. "La haremos volar, al igual que hicimos volar los ídolos en esta tierra", dice un hombre armado en referencia a la Casa Blanca. Un segundo hombre amenaza al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y a su homólogo francés, Francois Hollande. "Los vamos a asar … con cinturones (de explosivos) y coches bomba".