Multas millonarias, exclusividad extrema o cero responsabilidad propia son algunas de las cláusulas que Apple hizo firmar a la empresa GT Advance Technologies para poder convertirse en su exclusivo fabricante de cristales zafiro para iPhone. Un acuerdo que al principio parecía todo un ‘chollo’ para GTA, pero que ha terminado siendo su ruina. Las peticiones […]
Dirigentes Digital
| 20 oct 2014
Multas millonarias, exclusividad extrema o cero responsabilidad propia son algunas de las cláusulas que Apple hizo firmar a la empresa GT Advance Technologies para poder convertirse en su exclusivo fabricante de cristales zafiro para iPhone. Un acuerdo que al principio parecía todo un ‘chollo’ para GTA, pero que ha terminado siendo su ruina. Las peticiones de Apple, opresivas y restrictivas, han llevado a GTA Advance Technologies a la bancarrota una vez que se presentó el nuevo terminal y no incluía sus cristales.
Al parecer, la crisis nació cuando los ingenieros de Apple determinaron que los prototipos de pantallas de zafiro ofrecidos por GT no habían superado las pruebas de rotura y los estándares de la compañía. Según el parecer de Apple, los hornos de GT no eran capaces de producir cristal de zafiro lo bastante sólido. Tras este dictamen, la compañía de Tim Cook decidió volver la vista hacia la compañía Corning, fabricante de las pantallas Gorilla Glass 3 y prescindir de GT. Su inversión en maquinaria y el excedente de cristal fabricado, han obligado a la compañía a cerrar dos fábricas y a despedir a casi 1000 trabajadores.
En el contrato que se ha filtrado, Apple controlaba cómo y dónde se fabricaba el cristal de zafiro hiperesistente que se utilizaría en iPhone 6 y iPhone 6 Plus. En el caso de que GT tuviera algún error, se retrasara en la entrega o comentara algo fuera de lugar, entonces Apple tenía el derecho de multar a la empresa con 77 millones de dólares.
En cuanto a los términos de confidencialidad todo era relativamente coherente. En el acuerdo, Apple se asegura de que no hay peligro de que ninguno de sus datos salga a la luz. Eso sí, la compañía especifica que no se deberá hacer ninguna publicidad ni comunicación de este acuerdo. Si GT rompe esta cláusula de confidencialidad, inmediatamente será multado con 50 millones. Hasta aquí todo correcto, sin embargo, en el caso contrario, si Apple es quién decide romper este acuerdo o revelar algún secreto del proceso de fabricación del cristal zafiro, no tendrá ninguna penalización o reprimenda.
Del contrato filtrado se desprende que la empresa GT solo existe porque Apple así lo quiere. De hecho, la fábrica en la que se realizan, sita en Mesa (Arizona), pertenece a Apple y GT no es más que un alquilado. En este sentido, Apple les proporciona el equipamiento para la producción, pero este no tiene ninguna garantía.
Si GT tarda más de cuatro días en entregar los cristales, se le multaría con 77 millones de dólares que tendría que pagar al día siguiente. Además, si GT vendía este cristal de zafiro a alguien más, entonces la multa sería de 64.000 dólares por producto o 650.000 por mes.
En DIRIGENTES nos hemos puesto en contacto con GT Advanced Technologies, pero la empresa nos ha comunicado que no van ha hacer ninguna declaración al respecto en este momento.
GT Advanced Technologies tenía la responsabilidad de cumplir todas estas cláusulas, además de otras que no ha querido publicar. De esta manera, el fabricante dependía 100% de Apple. Sin embargo, este último ha sido el que a incumplido su palabra, al no utilizar el cristal zafiro para los nuevos iPhones. Resultado: GTA en bancarrota, al borde de la desaparición, Apple batiendo récord de ventas con el iPhone 6 y el iPhone 6 Plus y una pregunta importante: ¿Será este el contrato tipo que Apple hace firmar a todos sus proveedores?
