Ante la posibilidad de que el escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid se quede pequeño en cantidad por las operaciones irregulares identificadas por el Frob relacionadas con préstamos al sector inmobiliario, José Sevilla ha lanzado un mensaje tranquilizador explicando todas las pérdidas y quebrantos de la entidad fueron identificados a principios de 2012 antes de perdir los 24.000 millones del rescate financiero. "No queda ningún agujero por venir. Todas las pérdidas fueron reveladas y tuteladas por el Banco de España y la Comisión Europa tras pasar exhaustivos análisis en el pasado".
El dirigente ha querido dejar claro que Bankia es un proyecto consolidado con gran capacidad de crecimiento. "Para nosotros octubre está siendo normal, las tarjetas no afectan ni para bien ni para mal", ha indicado. "Los hechos hablan por sí mismos. La operativa de las tarjetas desaparece con el cambio de la presidencia", ha aclarado. Sevilla ha incidido en que hay que enfatizar lo que ha hecho la nueva directiva, "establecimos un nuevo gobierno corporativo y renovamos los consejos de administración de Bankia y de BFA".
Además, ha reconocido que si no lo denunciaron antes fue porque con el nuevo equipo de Goirigolzarri desaparecieron su uso. "Era muy difícil de conocer estas prácticas si no lo sabíamos. A partir de los correos publicados en prensa de la antigua directiva empezamos a investigar el gasto de las tarjetas".
También ha señalado los escándalos de otra época, tampoco afectará a los nuevos inversores. El Gobierno tiene marcada en su agenda su próxima desinversión en Bankia. "Los inversores separan el futuro del pasado y que la gestión en Bankia ha cambiado con un principio de transparencia". Sevilla ha indicado que en última estancia la decesión depende del Frob y del entorno bursátil.
Sobre el futuro de la entidad, ha señalado que los inversores les piden que revisen el actual plan de negocio. "Los objetivos planteados eran abiciosos y el mercado pide que lo ampliemos. Pero acabamos de completar la mitad del plan y queremos jugar el partido hasta el minuto 90".