La reforma del sistema energético europeo podría reducir el gasto en energía entre 27.000 y 81.000 millones de euros anuales en 2030, según un nuevo estudio titulado "Compromiso común con una transición sostenible y rentable de la energía en Europa", que Accenture ha realizado para Eurelectric. El estudio indica que el gasto europeo en gas […]
Dirigentes Digital
| 18 jun 2014
La reforma del sistema energético europeo podría reducir el gasto en energía entre 27.000 y 81.000 millones de euros anuales en 2030, según un nuevo estudio titulado "Compromiso común con una transición sostenible y rentable de la energía en Europa", que Accenture ha realizado para Eurelectric.
El estudio indica que el gasto europeo en gas y electricidad ha aumentado por encima del 18% en los últimos años, pasando de 450.000 millones de euros en 2008 a 532.000 millones en 2012. La mayor parte de este incremento corresponde a la electricidad y se debe fundamentalmente a la subida de precios por el fomento de las energías renovables, mientras que los volúmenes consumidos se han mantenido más o menos estables. El gasto energético total podría ser un 50% más alto en 2030 si el sector, los legisladores y los consumidores no colaboran en un esfuerzo común. "Hace falta un cambio de rumbo urgente en la reestructuración del sistema energético europeo para que el sector pueda ganarse el apoyo y la confianza de los consumidores sin perder su competitividad", según Hans ten Berge, secretario general de Eurelectric. "Nuestro estudio demuestra que, si se adoptan las políticas correctas, la transición energética europea podría suponer un ahorro superior a los 100 euros anuales por habitante."
Matías Alonso, managing director global de Utilities de Accenture, aseguró que el proceso de transición energética en Europa, tal como se ha realizado hasta ahora, dista mucho de ser perfecto. "Este análisis indica que el motivo principal es la falta de un mercado único de la energía en Europa, aunque también hay que tener en cuenta el coste de algunas nuevas tecnologías, que no ha bajado tanto como se esperaba, y el retraso en la adopción de medidas de eficiencia energética. Todas las partes afectadas admiten las graves consecuencias que el aumento del gasto energético tiene para los hogares y la industria en Europa.", añadió.
20.000 millones de euros de ahorro
El informe estima que la optimización de sistemas de energías renovables permitiría recortar el gasto energético entre 10.000 y 20.000 millones de euros anuales. En el área de generación, la coordinación de sistemas de energías renovables en Europa podría reducir de forma considerable los costes, ya que garantizaría la instalación de nueva capacidad solar y eólica en los mejores emplazamientos.
Mayor integración del mercado
La plena integración del mercado en las áreas de negociación y transmisión, unida a una mayor interconexión de infraestructuras transnacionales, podría limitar los costes de gestión de una carga cada vez más variable, mejorar el funcionamiento del mercado energético y contribuir a garantizar el suministro, recortando el gasto energético anual entre 8.000 y 27.000 millones de euros. "Aunque se han conseguido mejoras, el aumento del gasto energético exige medidas urgentes.", continuó Alonso.
Gestión más inteligente de la red y mejor respuesta a la demanda
La falta de capacidad en la red ha causado ya retrasos en varios proyectos de producción local de energía. La solución consiste en adoptar un modelo de gestión activa de sistemas que permita controlar la capacidad, la demanda y la producción de forma remota y más próxima al tiempo real, empleando para ello analítica avanzada y tecnologías de redes inteligentes. De este modo se generaría un ahorro estimado de entre 5.000 y 15.000 millones de euros en el gasto energético anual, aunque para conseguirlo sería necesario que las autoridades reguladoras crearan un marco que permitiera a las operadoras de red gestionar sus sistemas de una manera más activa.
Desplazar parte de la demanda máxima para reducir esta dependencia permitiría recortar los costes y mejorar la fiabilidad, generando un ahorro total del gasto energético que oscilaría entre 5.000 y 20.000 millones de euros al año.
Matías Alonso comentó que la progresiva eliminación de barreras a la eficiencia energética ofrecería a los consumidores nuevas opciones para reducir el consumo energético de manera sencilla. "Dichas opciones incluirían el uso de contadores inteligentes y dispositivos domésticos para adquirir mejores datos sobre el consumo, así como herramientas para desarrollar nuevos modelos de negocio y asociaciones que aumentarían los incentivos para la gestión energética, sin olvidar nuevos mecanismos de financiación para inversiones en eficiencia energética", añadió.