Merkel y Obama escenificaron un cierre de filas sobre el conflicto de Rusia y Ucrania para agotar la vía diplomática con la reunión de mañana miércoles en Minsk con Putin y Poroshenko sentados en la misma mesa. Pero días antes, en la Seguridad de Munich, la delegación estadounidense dejó clara su postura de armar a […]
Dirigentes Digital
| 10 feb 2015
Merkel y Obama escenificaron un cierre de filas sobre el conflicto de Rusia y Ucrania para agotar la vía diplomática con la reunión de mañana miércoles en Minsk con Putin y Poroshenko sentados en la misma mesa. Pero días antes, en la Seguridad de Munich, la delegación estadounidense dejó clara su postura de armar a Kiev para defender las regiones que se han levantado a favor de la adhesión a Rusia.
Obama destacó en la rueda conjunta con Merkel que la posición de Putin refuerza la unidad de Estados Unidos y Europa, pero advirtió que sobre la mesa están encima de la mesa, incluido el rearme de Ucrania, una línea roja establecida por el Kremlin para sentirse agredida por los aliados occidentales. La canciller alemana ha conseguido ganar tiempo para que Rusia llegue a la reunión sin sentirse presionada.
La Unión Europea ha ofrecido el gesto simbólico de retrasar las nuevas sanciones a Rusia hasta el próximo lunes para reforzar la confianza en las conversaciones de paz y así retirarlas si estas consiguen avances.
Sobre el terreno, el enfrentamiento entre el ejército ucraniano y las fuerzas prorusas se ha intensificado en las regiones de Donetsk y Lugansk. Según el recuento de la ONU, más de 5.300 personas han fallecido en el conflicto.