El Índice de Precios de Consumo (IPC) de China subió un 1,6% en septiembre respecto al mismo mes del año previo, según la Oficina Nacional de Estadísticas. Esta cifra queda por debajo el 1,8% que marcaban las expectativas y del 2% que se registró en agosto. Según muestran los datos oficiales, el IPC que excluye […]
Dirigentes Digital
| 14 oct 2015
El Índice de Precios de Consumo (IPC) de China subió un 1,6% en septiembre respecto al mismo mes del año previo, según la Oficina Nacional de Estadísticas. Esta cifra queda por debajo el 1,8% que marcaban las expectativas y del 2% que se registró en agosto.
Según muestran los datos oficiales, el IPC que excluye los alimentos tuvo aún un aumento menor, de solo un 1% en septiembre, lo que señala aún más la débil demanda del gigante asiático.
Según un comunicado redactado por Yu Qiumei, un alto cargo de la Oficina Nacional de Estadísticas, este freno del IPC se ha debido principalmente a la alta base de comparación del año pasado.
Unido a esto, los fabricantes han tenido que rebajar sus precios para continuar el negocio acechados por las tensiones crecientes que afectan a las empresas del país. El Índice de Precios al Productor (IPP) ha caído un 5,9% en septiembre con respecto al dato del mismo mes de 2014. A pesar del mal dato, ha cumplido lo esperado y se mantiene estable frente al descenso de agosto, cuando anotó su mayor caída desde 2009.
Según explican diversos analistas a Reuters, los débiles precios de la producción china amenazan con reducir las ganancias de las empresas y aumentar sus deudas. Esta situación, añaden los expertos, se espera que se mantenga durante, al menos, lo que queda de año.