La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) acaba de recibir un revés del Tribunal Supremo. El Alto Tribunal ha dictaminado que el precio por acción que fijó, 7 euros, no tuvo en cuenta que Mapfre ya había pactado con un grupo de accionistas 7,5 euros. En 2012, la aseguradora hizo una oferta por el […]
Dirigentes Digital
| 17 jul 2015
La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) acaba de recibir un revés del Tribunal Supremo. El Alto Tribunal ha dictaminado que el precio por acción que fijó, 7 euros, no tuvo en cuenta que Mapfre ya había pactado con un grupo de accionistas 7,5 euros.
En 2012, la aseguradora hizo una oferta por el 34% que no controlaba de Funespaña. En concreto, Mapfre ofreció un pago de siete euros por título, por lo que todos los inversores se desembolsaron 33,8 millones de euros.
Éste movimiento llegaba de después de que en 2010, la aseguradora comprara un 27,28% de la empresa de servicios funerarios, convirtiéndose en su segundo accionista. Y en diciembre de aquel año, procedió a su fusión con otra sociedad de su propiedad: Gesmap Servicios Funerarios. Tras esa operación, la multinacional pasó a controlar un 45,12% de Funespaña.
Aquí es donde entra la CNMV. El supervisor bursátil, autorizó la operación "al entender ajustados sus términos a las normas vigentes y considerar suficiente el contenido del folleto explicativo presentado".
Finalmente, Mapfre compró a razón de 7,50 euros por acción las participaciones que tenían los hermanos Valdivia, accionistas históricos de la empresa, y el accionista minoritario Wenceslao Lamas Fernández. En cambio, el expresidente de Funespaña, con un 15% de las acciones, recibió sólo siete euros.
Esta es la primera vez que el Alto Tribunal tumba un opa, señalando en la sentencia que la CNMVA está "obligada a garantizar que en la determinación del precio equitativo no se produzca una infravaloración de las acciones en perjuicio de los titulares de los valores afectados".