La mejora de los datos macroeconómicos tanto en Estados Unidos como en Europa, alejan los temores de posibles defauts, a pesar de que el crudo no termina de levantar cabeza, con el consiguiente riesgo para las compañías del sector petrolero, y de que Grecia se asoma una y otra vez al precipicio del impago. "Seguimos […]
Dirigentes Digital
| 23 abr 2015
La mejora de los datos macroeconómicos tanto en Estados Unidos como en Europa, alejan los temores de posibles defauts, a pesar de que el crudo no termina de levantar cabeza, con el consiguiente riesgo para las compañías del sector petrolero, y de que Grecia se asoma una y otra vez al precipicio del impago.
"Seguimos esperando que el mercado de high yield siga superando al de grado de inversión en lo que resta de 2015", afirmaba David Sekera, estratega de Morningstar a principios de abril. "En nuestra opinión, el mayor riesgo para los tenedores de bonos seguirá siendo el de una rebaja de calificación, más que cuestiones macroeconómicas", señalaba, para reconocer después que los acontecimientos mundiales que podrían precipitar un incremento de los diferenciales de crédito generales siguen ahí (debilidad de la Zona Euro, desaceleración rápida de China y otros emergentes, etc.).
Por su parte, desde Deutsche Asset & Wealth Management (Deutsche AWM) explicaban que, tras alcanzar un pico de retornos en diciembre de 2014, esta categoría de activos aún presenta oportunidades. Destacaban que en Estados Unidos, el volumen de emisiones se ha recuperado, también en el mercado secundario, mientras que en Europa, el respiro en nuevas emisiones ha dejado a la luz una fuerte entrada de fondos que evidencia una mayor demanda por el high yield.
Ahora, ¿cuáles son las preferencias de los gestores? Si empleamos las rentabilidades cosechadas, podemos tomar el pulso al posicionamiento global de los inversores en high yield europeo, señalan los analistas de Barclays.
Estos datos sugieren que los gestores dedicados a este activo se encuentran principalmente sobreponderados en ratings "B"/"CCC" e infraponderados en "BB". De hecho, se trata del nivel más alto del histórico. Al mismo tiempo, la baja presencia sistemática del sector financiero en comparación con los índices generales del mercado se mantiene, pero su magnitud va disminuyendo.
"La combinación actual de posicionamiento agresivo y rendimientos históricamente bajos puede parece que sugiere un mercado vulnerable, pero no creemos que las coberturas a gran escala estén justificadas", afirman estos expertos.
En su opinión, "el cambio en el ciclo de los tipos de Estados Unidos será el próximo reto importante para los mercados de crédito globales. Aparte de episodios puntuales de ensachamiento basados en la oferta, creemos que probablemente el high yield europeo se mantenga razonablemente firma mientras el Banco Central Europeo (BCE) implementa sus compras masivas de deuda (QE) y la Fed se mantiene a la espera".