Esta región, de hecho, supone ya el 11% de la industria global, frente al 9% de hace cuatro años, con Pekín superando ya a Singapur en el segundo puesto por detrás de Hong Kong, y representando el 3% del total mundial. Su activos también se han multiplicado por dos hasta alcanzar los 1,3 billones en […]
Dirigentes Digital
| 25 may 2016
Esta región, de hecho, supone ya el 11% de la industria global, frente al 9% de hace cuatro años, con Pekín superando ya a Singapur en el segundo puesto por detrás de Hong Kong, y representando el 3% del total mundial. Su activos también se han multiplicado por dos hasta alcanzar los 1,3 billones en 2015.
"Una clase media en expansión, alta tasa de ahorro y la prevalencia de depósitos bancarios frente a productos de gestión de activos suponen la mayor fuente de potencial para el sector en China", destacan estos expertos. Aunque, reconocen, el ritmo de crecimiento "probablemente se ralentice tras dispararse el año pasado".
Y, más allá de la oportunidad que supone, también desafía tanto a proveedores como a inversores. Para las gestores, indican, el reto "consisten en mantener un fuerte ajuste entre recursos y capacidades con el volumen de fondos y activos que se manejan". Mientras, los segundos deben "identificar las firmas capaces de seguir el rápido ritmo de evolución de la industria y sus áreas de distribución".
En positivo, la agencia de calificación llama la atención sobre los esfuerzos para impulsar la actividad transfronteriza, como las iniciativas legislativas bilaterales entre China y Hong Kong, la institución de inversión colectiva ASEAN y el Asian Regional Fund Passport, que "deben apoyar el desarrollo del segmento regional del sector". Con todo, reconocen, "aún queda mucho camino por recorrer antes de alcanzar un marco al estilo de las UCITS europeas".