En una reciente encuesta sólo 4 de 75 economistas esperaban que la Fed subiera los tipos de interés en el FOMC de esta semana. Por otro lado, sería ciertamente llamativo que el sesgo tras la reunión girara de nuevo a alcista cuando falta más de un mes para la reunión de abril. En resumen, una […]
Dirigentes Digital
| 23 sep 2015
En una reciente encuesta sólo 4 de 75 economistas esperaban que la Fed subiera los tipos de interés en el FOMC de esta semana.
Por otro lado, sería ciertamente llamativo que el sesgo tras la reunión girara de nuevo a alcista cuando falta más de un mes para la reunión de abril.
En resumen, una reunión de transición la de esta semana.
Lo que no significa que no me produzca algo de inquietud esta complacencia.
La cuestión de fondo es que, tras dos primeros meses del año bajo una fuerte inestabilidad del mercado y muchas dudas económicas, el reciente comportamiento del mercado y la mejora de los datos anticipa que una lectura algo más tranquila por la Fed del proceso de normalización monetaria. Pero, aún es pronto para anticiparlo. Y la Fed, ya lo saben, huye de provocar sorpresas en el mercado que se puedan convertir en un nuevo foco de inestabilidad.
En definitiva, cabe considerar entonces que la Fed rebaje su previsión de crecimiento a corto plazo y al mismo tiempo admita la incertidumbre elevada para valorar el escenario económico a medio y largo plazo. Sí, en función de los datos. Pero, reconociendo que si los datos siguen acompañando la progresiva calma en mercados y mejora económica se podrían retomar las subidas de tipos.
Lo que más llama entonces la atención es que la posición de los dovish puede perder protagonismo a corto plazo frente a los hawkish hasta el momento mucho más prudentes. Pero, cada vez más numerosos.
José Luis Martínez Campuzano es estratega de Citi en España.