Para comprobar qué productos de esta categoría tienen más presencia en las carteras de los fondos españoles, los expertos han analizado todos los fondos de renta variable (los fondos de renta variable global también pueden tener participaciones de fondos de renta variable europea), así como las de todos los fondos mixtos. El fondo que más […]
Dirigentes Digital
| 31 may 2016
Para comprobar qué productos de esta categoría tienen más presencia en las carteras de los fondos españoles, los expertos han analizado todos los fondos de renta variable (los fondos de renta variable global también pueden tener participaciones de fondos de renta variable europea), así como las de todos los fondos mixtos.
El fondo que más se repite en las carteras de los fondos españoles, es el Invesco Pan European Equity Fund. El producto, gestionado desde julio de 2003 por John Surplice y Martin Walker, busca incrementar a largo plazo el capital invirtiendo en una cartera de acciones o instrumentos vinculados a renta variable de empresas europeas, poniendo especial énfasis en las compañías de gran capitalización. Actualmente, y según datos de Morningstar, sus cinco mayores posiciones están ocupadas por Novartis, BP, HSBC, Roche y la petrolera Total.
Le sigue el MFS Meridian European Value Fund, un producto que se busca valor en empresas infravaloradas con respecto a su potencial de crecimiento de los beneficios de acuerdo con los resultados de la investigación fundamental ascendente que sigue el equipo liderado por Benjamin Stone. A cierre de abril, compañías relacionadas con el sector de consumo defensivo ocupaban sus principales posiciones. Nestle Reckitt Benckiser, Danone, Henkel y Heineken ocupaban las cinco primeras. Y en las 10 primeras aparecen también una empresa española: Amadeus.
En tercera posición del ranking se sitúa el Robeco European Conservative Equities. La selección de estas acciones con baja volatilidad se lleva a cabo empleando un modelo cuantitativo que las clasifica de diversas formas, incluyendo sensibilidad al mercado, volatilidad, valoración y momentum. Tal y como indican desde la entidad, las estrategias conservadoras de Robeco en renta variable están diseñadas para aprovechar la prima de riesgo del mercado con un riesgo a la baja notablemente reducido. La estrategia se centra en el riesgo absoluto/rentabilidad absoluta, y pretende maximizar los rendimientos ajustados al riesgo.
Además de los fondos que más se repiten en las carteras de fondos españoles, los analistas de Morningstar también han analizado los productos más contratados (en los que los fondos tienen más dinero invertido). En primera posición repite por este orden el Invesco Pan European Equity Fund, con un valor que supera los 525 millones de euros.
Más lejos se sitúan, en segunda y tercera posición, el Schroder ISF Euro Equity y el BlackRock Euro Markets Fund, con 265 y 257 millones de euros respectivamente. Ambos productos cuentan con un analyst rating Silver de Morningstar. El primero, mantiene un objetivo de revalorización del capital, principalmente a través de la inversión en valores de renta variable de sociedades de países que formen parte de la UEM. Las inversiones en renta variable están sujetas al riesgo del mercado y, potencialmente, al riesgo cambiario. Este fondo puede utilizar instrumentos derivados financieros como parte del proceso de inversión. Esto puede aumentar la volatilidad del precio del fondo al ampliar los eventos del mercado. A 10 años, el fondo de Schroders ha logrado una rentabilidad del 19,6%, frente al 16,3% de su índice de referencia (el MSCI European Monetary Union Net TR).
Por su parte, el BlackRock Euro Markets Fund busca maximizar el beneficio total. El Fondo invierte, como mínimo, un 70 % de sus activos globales en acciones ordinarias de empresas domiciliadas en aquellos Estados Miembros de la Unión Europea que participan en la UEM (Unión Económica y Monetaria). Otras exposiciones pueden incluir, entre otras, inversiones en aquellos Estados Miembros de la Unión Europea que, en opinión del asesor de inversiones, es probable que se unan a la UEM en un futuro próximo y empresas con base en otro lugar que ejercen la parte predominante de su actividad económica en países que participan en la UEM. A cierre de abril, sus principales posiciones eran ocupadas por Intesa Sanpaolo, Axa, Royal Dutch Shell, Sanofi y BBVA.