El ahorro conservador se triplica durante la crisis

"En un entorno en el que no hay producto que ofrezca una buena rentabilidad sin riesgo, canalizar los ahorros implica tomas de decisiones complicadas", indican desde Inverco. En este escenario, y tras los últimos años de crisis, el porcentaje de ahorradores que se declaran conservadores se ha triplicado, produciéndose un movimiento contrario en el caso de los perfiles dinámicos, que han pasado de representar el 17% en 2009 al 5% actual.

Aún así, los expertos reconocen que tal vez el cambio esté en la definición de propio perfil. Es decir, que aunque los inversores se sigan considerando conservadores, pueden tender a asumir más riesgo en su objetivo de obtener cierta rentabilidad en un entorno de tipos en mínimos.

Según la encuesta presentada por el Observatorio, y realizada por la empresa Front Qyery, los productos con mayor presencia en la cartera de los ahorradores siguen siendo los depósitos, con un porcentaje del 63%. Los planes de pensiones suponen un 47%, frente al 29% de los fondos de inversión. Todos ellos adelantan a la inversión directa en renta variable (27%). En el caso de los fondos de inversión, los particulares mantienen un perfil moderado y conservador, destinando un 29% de su patrimonio a estos productos. La rentabilidad, la seguridad y la confianza son los principales factores que tienen en cuenta a la hora de decidir dónde depositar sus ahorros.

Sin embargo, la tendencia apunta al cambio, ya que al preguntar a los encuestados qué productos prevén contratar en 2016, un 12% afirma tener en mente los fondos de inversión, frente a un 8% que se decanta por los depósitos bancarios.

¿Para qué ahorran los ciudadanos?

Es cierto que disponer de un remanente para imprevistos sigue siendo el principal motivo de ahorro para la mitad de los encuestados, pero los expertos consideran que "tenderemos hacia un cambio en el que la preocupación por la jubilación irá en aumento". Aún así, los planes de pensiones siguen manteniendo un segundo lugar en el ranking de productos. En concreto, la mitad de los ahorradores cuenta con un plan y 1 de cada 3 tiene un fondo de inversión, teniendo menos peso en los perfiles conservadores (21%).

Los datos reflejan la realidad. La inversión en planes ha bajado del 60% en 2013 al 47% actual. "La crisis y la renta disponible han acrecentado la preferencia hacia productos más líquidos", reconocen desde Inverco. Sin embargo, consideran que se trata de una cuestión coyuntural. "Cuando se normalice el mercado laboral, con más contratos estables y aumentos salariales, estarán más presentes en la canalización del ahorro", aseguran.

Jaime Benegas, miembro del Observatorio Inverco, indica que entre los que invierten en fondos, solo 4 de cada 10 tienen un conocimiento alto o muy alto del producto. Para Ángel Martínez Aldama, presidente de Inverco, "sigue siendo necesario que tanto el sector público como el privado sigan potenciando la educación financiera de los ciudadanos".

Canales de distribución

Según los datos del Observatorio, la oficina bancaria sigue siendo el principal canal para que los ahorradores se informen y contraten un producto. Pero los expertos han detectado un incremento cada vez mayor de las páginas web, sobre todo para informarse sobre la oferta de las entidades. Aún así, "el cliente se informa a través de las webs, pero a la hora de contratar pide ponerle cara a quien le va a firmar el contrato", indica Gonzalo Meseguer, miembro del Observatorio.

A su juicio, el porcentaje de ahorradores que utilizan plataformas online aumentará con rapidez, "no solo por los esfuerzos que las entidades financieras están realizando en este sentido, sino porque la propia sociedad tiende a ese movimiento, sobre todo a través de los smartphones".