El Ibex no puede desvincularse de la tendencia del mercado y volvió a teñirse de rojo. El indicador español dio su último cambio en los 10.271 puntos, lo que supone un descenso del 2,98% en la sesión y su cuarta jornada consecutiva de descensos. El balance semanal es aún más negro, ya que el parqué […]
Dirigentes Digital
| 21 ago 2015
El Ibex no puede desvincularse de la tendencia del mercado y volvió a teñirse de rojo. El indicador español dio su último cambio en los 10.271 puntos, lo que supone un descenso del 2,98% en la sesión y su cuarta jornada consecutiva de descensos. El balance semanal es aún más negro, ya que el parqué madrileño se deja cerca de un 5%.
Entre las razones de peso que han lastrado el mercado está, de nuevo, China. El mal dato de actividad del sector manufacturero del gigante asiático ha hecho que se prenda la llama de los números rojos. La actividad se contrajo en agosto a su mayor ritmo en casi seis años y medio, debido a la debilidad de la demanda doméstica y de las exportaciones. Este dato confirma los peores temores: el crecimiento de la segunda mayor economía mundial se esté desacelerando con fuerza.
Los principales indicadores asiáticos reaccionaron a la baja. Entre ellos, destaca la caída del 4,27% protagonizada por la bolsa de Shanghai, que cierra su peor semana desde el pasado 3 de julio. Por su parte, la bolsa de Hong Kong también ha cerrado con caídas tras dejarse un 2,32%, por lo que ya cotiza a mínimos de los últimos 15 meses. El parqué de Tokio, que perdió un 2,1%, y el surcoreano, que bajó un 2,2%, tampoco se libraron de la caída.
La otra razón de peso que ensombrece los mercados es la inestabilidad política que reina en Grecia. Cuando ya parecía que las aguas habían vuelto a su cauce, el primer ministro griego, Alexis Tsipras, convocaba elecciones anticipadas para el próximo 20 de septiembre y presentaba su dimisión.
La noticia ha sentado como un jarro de agua fría en el ánimo inversor, al que ahora también se suma la iniciativa de la Plataforma de Izquierda, la facción más radical de Syriza, de presentar su propia lista a los comicios.
Wall Street y la Fed
Al otro lado del Atlántico, la situación también refleja el pesimismo generalizado. Wall Street cerraba con pérdidas después de que el Dow Jones y el Standard & Poor’s despidieran la sesión con caídas siguiendo la inercia del mercado europeo que se sumaba a la preocupación por China y Grecia.
En el mercado de materias primas, el barril de petróleo Brent cotiza en los 46 dólares, mientras que el de West Texas lo hace en los 40 dólares. Por otra parte, en el mercado de deuda, la rentabilidad del bono a diez años sube por la inestabilidad y repunta al 2%, mientras que la prima de riesgo supera los 140 puntos básicos.