Aunque aún no sabemos bien el desglose de los últimos datos de crecimiento de la Zona Euro conocidos el viernes, sí conocemos que ha sido la demanda interna la que lo explica de forma unánime. En frente, la aportación negativa de la demanda externa. ¿Consumo o inversión? ¿inversión empresarial o construcción? ¿inventarios? No lo sabemos. […]
Dirigentes Digital
| 23 sep 2015
Aunque aún no sabemos bien el desglose de los últimos datos de crecimiento de la Zona Euro conocidos el viernes, sí conocemos que ha sido la demanda interna la que lo explica de forma unánime. En frente, la aportación negativa de la demanda externa.
¿Consumo o inversión? ¿inversión empresarial o construcción? ¿inventarios? No lo sabemos.
Pero sí podemos intuirlo: el consumo privado habrá sido probablemente el principal motor del crecimiento, aunque un crecimiento al final moderado. Y esto no es nuevo.
¿Por qué? En su último Informe mensual el Banco Central Europeo (BCE) analiza los determinantes del comportamiento del consumo privado.
Si observamos la evolución del consumo privado en la Zona Euro y sus determinantes, vemos que en definitiva, la caída de los precios de la energía ha explicado un tercio del aumento de la renta disponible de las familias. El resto ha venido explicado en su mayor parte de la mejora del empleo y del crecimiento de los salarios. La importancia del componente empleo explica por qué los países que más mejora están observando en el consumo son precisamente aquellos donde las mejoras del mercado de trabajo han sido mayores: España, Irlanda y Portugal.
Pero, mejora del consumo que por el momento sigue siendo coherente con la continuidad en el proceso de desapalancamiento. Aunque podemos cuestionar el ritmo de reducción de la deuda, como también podemos hacerlo con respecto al propio ritmo de aumento del consumo privado.
En estos momentos la proyección de aumento del consumo privado para este año es del 1,5/1,7% tras el aumento del 1,0% estimado en 2014.
¿Les parece poco? Relean todo lo anterior. Y consideren también la mejora financiera, de costes y revalorización de activos que hemos visto en los dos últimos años.
Al final, la aceleración del consumo privado en el futuro seguirá dependiendo en mayor medida del comportamiento del empleo. En estos momentos un 2,0% inferior al existente antes de la crisis para el conjunto, cuando la tasa de desempleo sigue en niveles elevados del 11,0 %. Hay que hacer, involucrando también al BCE.
José Luis Martínez Campuzano es estratega de Citi en España.