La SEC envió la propuesta a la industria el pasado mes de diciembre, y el lunes acababa el plazo para dar respuesta a las exigencias del regulador, que pasan por limitar el uso de derivados en cartera al 150% de la exposición total, o al 300% si los gestores demuestran que con su uso pueden […]
Dirigentes Digital
| 31 mar 2016
La SEC envió la propuesta a la industria el pasado mes de diciembre, y el lunes acababa el plazo para dar respuesta a las exigencias del regulador, que pasan por limitar el uso de derivados en cartera al 150% de la exposición total, o al 300% si los gestores demuestran que con su uso pueden limitar las pérdidas derivadas de los movimientos del mercado.
En su respuesta oficial, los dos principales organismos que representan a la industria, la Investment Adviser Association y el Investment Company Institute (ICI), aseguran que la norma afectaría negativamente a la capacidad de los gestores para administrar el capital de sus clientes. "la limitación reducirá el acceso del inversor a ciertos tipos de fondos y a estrategias de cartera, incluyendo algunas que sirven para mitigar el riesgo de la inversión", explican en la misiva como respuesta a la SEC.
Según un estudio del propio ICI, basado en el análisis de 6.661 fondos de inversión, 471 productos con 613.000 millones de dólares en activos excederían esos límites, incluyendo un 15% de los fondos que invierten en bonos.
El problema es que el regulador considera que el incremento del uso de derivados, que los gestores suelen emplear también por ser más baratos que otras fórmulas, expone a los inversores a un mayor apalancamiento, y también a un incremento de las pérdidas potenciales. Pero los gestores argumentan que son activos más fáciles de comprar y vender que muchos otros similares, especialmente en los mercados de renta fija menos líquidos, donde el riesgo de ‘iliquidez‘ para hacer frente a los reembolsos en determinadas situaciones se ha disparado desde el cierre del fondo de renta fija high yield de Third Avenue.