La firma espera que la presión sobre los negocios de renta fija, materias primas y divisas, así como sobre los ingresos de trading continúe: desde el máximo de 35.000 millones de 2012, las ventas se han reducido hasta los 26.000 millones. "Los bajos volúmenes de negociación presionan los ingresos derivados de los mercados de capitales, […]
Dirigentes Digital
| 31 mar 2016
La firma espera que la presión sobre los negocios de renta fija, materias primas y divisas, así como sobre los ingresos de trading continúe: desde el máximo de 35.000 millones de 2012, las ventas se han reducido hasta los 26.000 millones.
"Los bajos volúmenes de negociación presionan los ingresos derivados de los mercados de capitales, al tiempo que las preocupaciones por los tipos de interés, la incertidumbre económica, la caída de las commodities y la desaceleración emergente se combinan para lastrar los resultados en varías líneas de negocio", apuntan estos expertos.
Un contexto, advierten, en el que "probablemente sea mas difícil implementar estrategias de revisión y planes de reestructuración". En concreto, Deutsche Bank, Credit Suisse y Barclays se enfrentan a importantes "riesgos de ejecución".
Al mismo tiempo, BNP Paribas, HSBC, Société Générale y UBS tienen menos necesidad de cambiar sus modelos de negocio de forma considerable, pues sus negocios subyacentes están generado suficientes, aunque pocas, ganancias.