El carnaval de Uruguay, el más largo del mundo

En las cálidas noches de febrero de Uruguay, al fragor del verano austral, los carnavaleros se preparan para transmitir su visión del país y del mundo a través de la crítica, la sátira, la parodia y el humor. En todo el país latinoamericano, y especialmente en Montevideo, las actuaciones, la música, la danza y las vestimentas coloridas y atrevidas calientan motores para el carnaval más largo del mundo.

No hace falta imaginar lo que supone 40 días y noches de candombe, desfiles, disfraces y chirigotas sin parar. Un espectáculo digno de ver. Todo empieza con la elección de la Reina del Carnaval para que todos los parodistas, las revistas, los humoristas los lubolos y las murgas calienten motores.

Uruguay se paraliza para dar rienda suelta a los sentimientos más carnales, a la fiesta más desenfrenada y a un jolgorio que cada año atrae a más y más visitantes. Y es que un carnaval es un acontecimiento festivo que España tiene bien presente gracias a eventos como los realizados en Cádiz o Tenerife, pero ninguno de ellos se extiende durante 40 días como el de Uruguay, siendo de esta forma el más largo del mundo.

La sátira, la comedia y el humor permite a los visitantes que viajan al país estas semanas participar en una gran fiesta y, a su vez, tomar contacto con el espíritu y el carácter de los uruguayos. Los conjuntos se dividen en parodistas, revistas, humoristas, lubolos (que practican el candombe) y murgas (la chirigota española), siendo estas últimas las expresiones más características del carnaval charrúa, sobre todo, en el sur del país, mientras que en el norte, por su cercanía a Brasil, predomina la samba.

El Desfile de Llamadas, el más característico del carnaval uruguayo, donde los protagonistas son la herencia afrouruguaya y el ritmo del candombe (que fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial por la UNESCO). Realizado en los barrios Sur y Palermo de la capital, se evocan los encuentros de los esclavos de color que se reunían en las afueras de la ciudad en el siglo XIX. Decenas de miles de espectadores vibran con la fuerza y el colorido de los tambores y las esculturales bailarinas.

El carnaval uruguayo sigue su camino hasta finales de febrero con concursos oficiales de murgas, que actuan en escenarios al aire libre ubicados por todo el territorio. No hay que olvidar que en esta época del año Uruguay sigue en pleno verano austral, por lo que el ambiente es aún más tórrido y excitante si cabe.

hemeroteca

Add a comment

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *