Primer cuarto de 2015. Los estímulos de la autoridad monetaria de la Zona Euro, enfrentados al endurecimiento de la política de la Fed, llevaban a expertos y gestores a apuntar a la paridad a finales del ejercicio. Pero, la ‘esperada’ divergencia entre ambas orillas del Atlántico no ha llegado a materializarse, ambos bancos centrales siguen […]
Dirigentes Digital
| 05 abr 2016
Primer cuarto de 2015. Los estímulos de la autoridad monetaria de la Zona Euro, enfrentados al endurecimiento de la política de la Fed, llevaban a expertos y gestores a apuntar a la paridad a finales del ejercicio. Pero, la ‘esperada’ divergencia entre ambas orillas del Atlántico no ha llegado a materializarse, ambos bancos centrales siguen embarcados en las medidas ‘ultra-expansivas’ y la normalización queda lejos…
De hecho, el mensaje dovish (acomodaticio) lanzado por Janet Yellen ante el Club Económico de Nueva York llevó al dólar a registrar su peor semana en cerca de dos meses; mientras que el Dollar Index ha caído a mínimos de cinco meses y medio.
"Las medidas del BCE serán, en términos netos, más bien apreciatorias para el euro, sobre todo si la Fed sube menos de lo que se venía adelantando", explica el Departamento de Análisis de Bankinter. En consecuencia, establecen su rango objetivo para el euro/dólar en 1,05/1,15 para 2016/17 frente al rango anterior de entre 1,00/1,10.
Citi, por su parte, estima que el mismo se sitúe entre los 1,08 y los 1,15. "No es tanto que el euro suba como el que dólar baje. No, no es el euro, es más bien el dólar", indica su estratega en España, José Luis Martínez Campuzano, para establecer la diferencia entre el comportamiento del cruce ahora y hace un año.
Destaca este experto que "durante buena parte del último año y medio de subida del ‘billete verde’ hemos asistido a caídas en las materias primas (deterioro en las perspectivas de inflación), tensión en los mercados emergentes (dudas sobre la solidez de la recuperación mundial) y como consecuencia de todo esto caídas en las Bolsas y mayor inestabilidad financiera". Y es que, explica, "su apreciación de la mano de un cambio en el sesgo de la política monetaria desde la Fed ha aflorado y acentuado algunos excesos (materializado las debilidades de fondo) acumulados en los últimos años. Otra cosa bien diferente hubiera sido si realmente la economía norteamericana hubiera justificado con su fortaleza el inicio de la normalización monetaria, convirtiéndose de hecho en el motor de crecimiento mundial. Pero, esto no ha ocurrido".
Reconoce que, el sesgo cauto de la autoridad monetaria estadounidense, sumado al descenso del dólar, "es sin duda positivo para los activos emergentes y las commodities". Ahora bien, matiza, "no tengo nada claro que lo siga siendo con el tiempo. Especialmente si la inflación repunta y/o los datos económicos siguen siendo ambiguos en las principales economías".
Por otra parte, Capital Economics afirma tajante que el BCE "no puede permitirse el lujo de ‘sentarse’ y dejar que el tipo de cambio del euro se fortalezca aún más", a la luz de los recientes datos de actividad e inflación más bien débiles… "Aunque el pasado otoño su caída no derivó en una bonanza de las exportaciones, los resultados comerciales de la Zona Euro habrían sido aún peor sin ella", advierten. Del mismo modo, añaden, su descenso "ha desempeñado un papel importante en una reducción más acusada de los precios".
Aunque estos expertos creen que la Fed se va a ver obligada a subir los tipos más de lo que espera el mercado (y estiman que un aumento de 50 puntos básicos en las expectativas del precio del dinero a dos años vista sería suficiente para alcanzar la paridad, que es su objetivo para finales de 2016), también consideran que Draghi no puede simplemente esperar a la autoridad monetaria norteamericana. "Es difícil aceptar que no va a tratar ni siquiera de debilitar al euro o mitigar sus efectos. Puede rebajar más los tipos y el banquero italiano ha demostrado ser un manipulador verbal eficaz de los mercados… Y si todo esto falla, existe la posibilidad de sacar el ‘dinero helicoptero’", concluyen.