La recaudación total del Estado por ingresos tributarios alcanzó 175.000 millones en 2014, supone un 8,78% más que respecto al año anterior y la cifra más alta desde que comenzó la crisis económica. La recuperación viene de los dos principales impuestos que castigan más a los ciudadanos, el IRPF y el IVA, siete de cada […]
Dirigentes Digital
| 29 abr 2015
La recaudación total del Estado por ingresos tributarios alcanzó 175.000 millones en 2014, supone un 8,78% más que respecto al año anterior y la cifra más alta desde que comenzó la crisis económica. La recuperación viene de los dos principales impuestos que castigan más a los ciudadanos, el IRPF y el IVA, siete de cada diez euros que entran en la caja de Hacienda provienen de ellos.
Los dos tributos han batido récord en ingresos. Los ingresos por IRPF alcanzaron una cifra de 72.662 millones, batiendo por poco lo que recaudó el Estado en 2007. La presión fiscal recae sobre todo en la renta de los contribuyentes, al aportar un 41% del total recaudado. Por su parte los ingresos por IVA, que penaliza al consumo, ascendieron a 56.174 millones, 300 millones más que en 2007, cuando Hacienda ingresó más que nunca en su historia hasta el pasado año.
Las arcas del Estado están comenzó a notar la recuperación económica y, sobre todo, las subidas de impuestos que se han producido desde 2012, justo después de que Mariano Rajoy asumiera la Presidencia del Gobierno. El IVA ha subido en dos ocasiones. En julio de 2012 el tipo general pasó del 18% al 21%; el tipo reducido, del 8% al 10%; y algunos productos de base imponible superreducida y reducida pasaron a la general, es decir, del 4% y el 8% al 21%. Y en abril de 2013 se aplicó la subida a determinados productos sanitarios, que pasaron a tributar del tipo reducido al general. Por su parte, el IRPF ha subido hasta en cinco veces. En diciembre de 2011 se produjo la primera y más importante: un 0,75% a las bases inferiores a 17.707,20 euros y hasta el 7% para bases superiores a 300.000 euros. Luego vinieron el aumento de las retenciones a las actividades profesionales en julio de 2012 (del 15% al 21%) un cambio en el gravamen para las ganancias patrimoniales generadas en menos de un año (hasta un 52%) y la extensión del llamado ‘recargo solidario’.
Sin embargo, la recaudación total del Estado es inferior a 25.000 millones respecto a 2007. El Impuesto de Sociedades es el único tributo estatal que no ha evolucionado favorablemente desde que en 2008 se redujera prácticamente a la mitad. Las empresas españolas pagaron en 2007 hasta 44.823 millones en una época de récord de beneficios empresariales.
En 2014, el Estado ingresó 18.713 millones supone un 36% menos que lo recaudado en 2007 y un 1,76% menos que el año pasado. A los expertos le sorprende este comportamiento y que no se recupere a la vez que el resto de tributos. El presidente del REAF-REGAF del Consejo General de Economistas, Jesús Sanmartín, cree se debe a la política de incentivos fiscales y a la reducción de beneficios de estos años. "El Impuesto de Sociedades tiene que aportar más en los próximos años con la última reforma fiscal al ensancharse las bases fiscales".
Por su parte, Valentí Pich, presidente del Consejo General de Economistas, indica que el año clave para valorar la evolución del Impuesto de Sociedades será 2015, para ver el impacto de la reforma fiscal, "además, hay recordar que el PIB todavía está por debajo de 2007", ha añadido.