George Soros asegura que "cuando mira a los mercados financieros hay un serio desafío que le recuerda a la crisis que tuvimos en 2008" Y en ese desafío tiene una importancia clave China que está sembrando de inestabilidad las bolsas mundiales este comienzo de año. Según Soros "el gigante asiático lucha por encontrar un nuevo […]
Dirigentes Digital
| 07 ene 2016
George Soros asegura que "cuando mira a los mercados financieros hay un serio desafío que le recuerda a la crisis que tuvimos en 2008" Y en ese desafío tiene una importancia clave China que está sembrando de inestabilidad las bolsas mundiales este comienzo de año. Según Soros "el gigante asiático lucha por encontrar un nuevo modelo de crecimiento y la devaluación de su moneda es la forma en la que está transfiriendo sus problemas al resto del mundo" Además, también se ha referido a la reciente vuelta a tipo de interés positivos en EEUU sobre la que dice que es desafío para el mundo en desarrollo.
Por su parte, el ministro de Economía británico, George Osborne habla de "cóctel peligroso" de amenazas globales que puede poner en jaque a la economía británica ya que, asegura, la complacencia ha comenzado a instalarse. El cóctel del que habla Osborne incluye como ingredientes la desaceleración económica de China, Brasil y Rusia, la caída de los precios de las materias primas y las tensiones políticas en Medio Oriente.
"El que piense que la misión está cumplida en la economía británica está cometiendo un grave error", dirá a dirigentes empresariales en un encuentro en Cardiff, según extractos de su discurso publicados por el Tesoro. "2016 puede ser el año en que ponernos a trabajar y hacer las reformas estructurales que Reino Unido tanto necesita, o puede ser el año en que miremos hacia atrás como comienzo de la decadencia. Este año, sencillamente, la economía es una misión crítica " asegurará Osborne.
Lo cierto es que la economía británica ha comenzado 2016 inmersa en una serie de datos desfavorables como el estancamiento de las exportaciones y la demanda interna empezando a resentirse ante la perspectiva de más años de austeridad y el riesgo de una salida británica de la UE.