Según dataos de KPMG, este fondo gestiona unos 175.000 millones de dólares, con lo que la cifra de pérdidas es, en parte, asumible. Sin embargo, evidencia el riesgo en el que, no solo los fondos soberanos, sino también los de inversión, incurren al mantener elevadas exposiciones en ciertos valores.
Los datos recopilados por Bloomberg evidencian que el Qatar Investment Authority es el mayor tenedor de acciones preferentes de Volkswagen (13%) y el tercer mayor accionista de sus títulos ordinarios (17%). El desplome de la compañía automovilística le habría costado 4.800 millones de dólares.
Por si fuera poco, el fondo soberano es además el mayor inversor de la compañía minera Glencore, que se ha desplomado un 77% en lo que va de año. Una participación del 8,2% en su capital con la que habría perdido otros 1.100 millones de dólares en solo 10 sesiones. El diario Financial Times eleva la cifra de pérdidas por la exposición a Glencore a 2.700 millones de dólares durante el trimestre.
La situación por la que atraviesa el fondo soberano de Qatar se repite entre otros productos de inversión que mantienen elevadas posiciones a ambas compañías. Gestoras nacionales como Bestinver se han visto incluso obligadas a dar la cara ante sus inversores para analizar el impacto del desplome de estas compañías en sus carteras.
Pero no solo ella está siendo afectada por el hundimiento de la automovilística alemana. Firmas como Allianz Popular Asset Management también se han visto perjudicadas en productos como Eurovalor Emergentes Empresas Europeas, con un peso de Volkswagen en el producto del 4,7%, ligeramente superior al 4,5% que pesa en el fondo Arte Financiero de Novo Banco Gestión.
hemeroteca