Entre abril y junio de de 2014 el beneficio neto de Samsung ha sido de 6,25 billones de wones, alrededor de 4.550 millones de euros, un 19,5% menos respecto al mismo periodo del año pasado, cuando superó los 5.200 millones de euros.
En menor medida también cayó la facturación, concretamente un 8,9%, con poco más de 38.000 millones de euros, debido a la menor demanda global de smartphones y tablets, además de por el aumento de gasto en marketing.
La división de móviles, una de las más importantes para la compañía, redujo su beneficio neto un 27% en términos interanuales, estableciéndose así en términos totales en los 3.200 millones de euros.
No obstante, parece que la compañía tecnológica surcoreana apuesta porque el próximo trimestre habrá mejores resultados, debido precisamente a que espera que la demanda de productos aumente, si bien la competitividad en el sector es cada vez mayor.