Entre los años 1997 y 2001, la bolsa neoyorquina vivió un auténtico ‘boom’ de salidas a bolsa de empresas vinculadas al negocio de Internet. La peligrosa mezcla de subidas espectaculares en bolsa y la disponibilidad de liquidez fomentaron una corriente especulativa. El momento álgido de la burbuja tecnológica estuvo marcado por la desafortunada compra de […]
Dirigentes Digital
| 03 mar 2015
Entre los años 1997 y 2001, la bolsa neoyorquina vivió un auténtico ‘boom’ de salidas a bolsa de empresas vinculadas al negocio de Internet. La peligrosa mezcla de subidas espectaculares en bolsa y la disponibilidad de liquidez fomentaron una corriente especulativa.
El momento álgido de la burbuja tecnológica estuvo marcado por la desafortunada compra de Time Warner por parte de AOL el 10 de enero del 2000 por 164.000 millones de dólares. Según BNY Mellon, era una época caracterizada por el rendimiento desenfrenado del sector, que finalmente se alejó de los beneficios (o de la falta de ellos) en muchos negocios.
La corriente llevó al Nasdaq a cotizar por encima de los 5.000 puntos. Pero, de repente, la ‘burbuja puntocom’ estalló provocando el cierre de empresas, el desplome de las cotizaciones, inversores arruinados… En definitiva, Wall Street mostraba un panorama desolador. Entre 2000 y 2003, desaparecieron casi más de 4.800 empresas de Internet.
El indicador tecnológico se desplomó un 77,9% en solo dos años y medio, llegando al mínimo de 1.114 puntos el 9 de octubre de 2002. Este lunes, el Nasdaq ha vuelto a alcanzar la cota de los 5.000 puntos.
Repetir la historia
Facebook compró WhatsApp en 2014 por la friolera de 19.000 millones de dólares. Además, la popular red social también adquirió Instagram en 2012 por 1.000 millones.
En octubre de 2014, Alibaba protagonizó la mayor OPV de la historia tras conseguir 25.000 millones de dólares en su salida a bolsa.
Pero no sólo Facebook o Alibaba captan llaman la atención en los mercados. Compañías como Twitter o Linkedin también han saltado a la actualidad informativa. La pregunta que recorre el mercado es si se puede volver a repetir la burbuja.
Brian Duncan de The Boston Company (TBCAM), parte de BNY Mellon, sostiene que, aunque es preocupante que algunas empresas tecnológicas sin ingresos o con ingresos mínimos vuelvan a ser valoradas en miles de millones, hay diferencias importantes entre el 2000 y la actualidad.
Además, el experto señala que no ve "exuberancia irracional ni que la gente hable de cosas absurdas o inalcanzables". Duncan también apunta que, "aunque está llegando mucho dinero al mercado privado, lo importante es que las empresas son capaces de crear modelos de negocio que pueden ser significativos, mientras que antes todo eran esperanzas y exageraciones".